Vitoria se rinde al color de la moda africana

Bajo la batuta de la presentadora Soumaya Eddimokrati y ante la atenta mirada de los cuatro miembros del jurado, desfilaron 26 modelos de 10 países. La comunidad de la antigua colonia española fueron, de hecho, los primeros en calentar motores con una jaima en la que, tumbados sobre sus alfombras, compartieron té y dátiles en la resaca de su fiesta nacional, el pasado viernes.

Con las canciones de Malick ya sonando de fondo, los participantes convirtieron los servicios del kiosko de la Florida en un improvisado camerino. Una vez listos, los primeros en estrenar la alfombra roja fueron Issa Sambe y sus hijas, Marienne y Adja. Procedentes de Senegal, irrumpieron él con un traje típico de fiesta y las dos chicas con los atuendos que solían llevar antaño las abuelas de su país, una en amarillo y la otra en azul y rosa.

La siguiente en salir fue Mariam Keita, en representación de Costa de Marfil. Con vestido en dos piezas, «su nombre es ganfani, que significa 'moderno'. Es muy colorido y está hecho con tela wax». Un tipo de tejido que, explicaba, «se compra para bodas, bautizos y fiestas familiares. En mi caso es para cuando se celebra un compromiso».

Así lo suscribía su compañera Awa Keita, con una prenda muy similar en un amarillo brillante. «El mío es un diseño más joven, con un corte delante y una cola. Es más para ir a una fiesta o a una discoteca», aclaraba. También confeccionado en la misma tela, la wax, que fue la más escogida por las concursantes. Así, también la escogió Aoua Oudrago, de Burkina Faso.

Y aunque la mayoría de las participantes fueron mujeres migrantes, también hubo alguna mestiza. Era el caso de la hija de Elsa Pinadero Pérez, Elaia, de sangre camerunesa, a la que vistió con el traje tradicional vasco con su falda, camisa y corpiño. El vitoriano Josean Morlesín también llevó a su hija Irene, pero el que acabó vestido de africano fue él, con un conjunto de Ghana.

El otro hombre que se atrevió a pasear por la alfombra fue Abba Kane. En su caso, tan elegante, se presentó de rigurosa etiqueta. Y es que los senegaleses no sacan del armario su 'sabandor' para cualquier cosa. «Esto solo se pone para un matrimonio, un bautismo o un funeral. Hay otros a parte de este, pero yo lo he escogido porque me sienta mejor», compartía entre risas ya con sus 'mukke' (un calzado similar a las babuchas marroquíes) y su 'tengade' (un sombrero de mimbre con decoraciones en cuero policromado) ya en la mano.

Y, si por algo destaca la moda africana, es por su gran colorido. Dorado, rojo y verde fueron los tonos escogidos por Pamela Kusi, de Ghana. Sus compatriotas Raquel Kusi y Lodina Nti, también hicieron honor a esa fama con otro tipo de tela africana, el kente. Aunque el estampado más figurativo fueron los hermosos soles del vestido Sainabou Nje, de Gambia. Los últimos en salir fueron los 12 miembros de la asociación Haaly Pular y Cristina Velasquez, de Nicaragua, que lució un vestido de dama de honor común en las bodas de Senegal.

Mientras el jurado deliberaba, el concierto de Reggae Band puso punto final a esta primera pasarela africana, que no será ni mucho menos la última actividad. La semana dedicada al continente tan solo acaba de empezar y continuará esta próxima semana. «El objetivo es acercar un poco de nuestro mosaico cultural y compartirlo con la ciudadanía», resumía Baba Ahmed Hamadi, responsable de Sahara-Gasteiz, una de las 18 asociaciones que integran la diáspora africana, que este año reivindicará el papel de la mujer.

Así, este próximo martes Montehermoso acogerá una conferencia sobre violencia de género a cargo de la activista por los derechos de los migrantes Soukaina Ndiaye y el jueves tendrá lugar un encuentro de mujeres en el Centro Cívico El Campillo donde reflexionarán sobre su papel en la sociedad y su situación en África. El fin de semana dará por cerradas estas jornadas festivas con un concierto en Los Fueros el sábado y un torneo de fútbol 11 mixto en La Vitoriana los días 9, 11 y 18 de julio.