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Mercadona ha suspendido temporalmente su servicio de venta online en Vitoria además de en Madrid debido al repunte de pedidos provocado por el cierre de colegios y la recomendación de teletrabajar para hacer frente al coronavirus. Los tramos en los que las furgonetas de ... reparto pueden llegar a las casas de los clientes están completos, así que la cadena de supermercados ha optado por dejar de ofrecer este servicio de forma temporal hasta que pueda garantizar su buen funcionamiento.
«Hasta que nos sirvamos los tramos pendientes no vamos a servir más. Iremos sirviendo conforme se vayan liberando tramos», ha precisado la empresa presidida por Juan Roig a EL CORREO. La venta online supone únicamente un 2% del volumen de ventas del grupo valenciano, por lo que la mayoría del personal de la empresa trabaja en las tiendas físicas. Las mercancías se reciben cada noche y el supermercado vuelve a abrir con todos sus productos por la mañana, así que no existe riesgo de desabastecimiento.
En otros supermercados de la ciudad el reparto a domicilio funciona con normalidad. Simply y BM continúan con las entregas como cada día y, lejos de suspenderlo, El Corte Inglés y Carrefour han optado por reforzarlo. «Los pedidos están creciendo de forma importante pero se está cumpliendo con todos, y las ventas físicas también han aumentado notablemente», indican los responsables del primero. «En la web hemos colgado un aviso recordando a los clientes que sean solidarios para que lo utilicen las personas con problemas movilidad que no pueden venir a las tiendas», explica Javier Urrizar, director de Carrefour Gorbeia.
Este miércoles los supermercados de la capital alavesa lucen un aspecto similar al del martes y la tarde del lunes. El personal se esfuerza en reponer la mercancía y no hay desabastecimiento, pero las estanterías de papel higiénico están casi vacías. Otras de las más populares son las de los pañuelos de papel, la pasta, las conservas de verduras y legumbres, frutas o lácteos como yogures. «Está siendo un no parar de trabajar, no deja de venir gente», suspiraba este mediodía una cajera en uno de los locales más céntricos. Otros establecimientos como Carrefour Gorbeia han vivido una jornada más tranquila.
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