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El del tocomocho es de los timos más viejos y populares. Pese a que es bien conocido, de vez en cuando, alguna persona sigue cayendo en este engaño, que suelen poner en marcha, al menos, un par de estafadores. Es lo que ha ocurrido ... recientemente en Vitoria. Según ha informado este viernes la Policía Local, el Palacio de Justicia cuenta desde finales de 2019 con un atestado tramitado por la Guardia Urbana, en el que se investiga a un matrimonio residente en la comunidad de Madrid como presuntos autores de un delito de estafa. Ambos -él de 58 años y ella de 54 y con antecedentes penales por el mismo motivo- timaron 6.400 euros a una vecina de la capital alavesa, de 79 años de edad, empleando el viejo método.
Los hechos ocurrieron el pasado 28 de noviembre cuando abordaron a la víctima con una preparada puesta en escena. Tras «ficharla», la mujer ahora investigada se le acercó y le preguntó por un lugar donde cobrar un boleto premiado de la ONCE. Acto seguido apareció el varón que, como ocurre en estos casos, se introdujo en la conversación y les indicó que él sí sabía. Les invitó a subir a su vehículo para acercarlas.
Durante el trayecto, la mujer les propuso que si ellos tenían dinero se lo dieran y ella les entregaría el boleto premiado con 24 millones de euros. El gancho accedió, paró el vehículo y, supuestamente, sacó de un banco 12.000 euros guardados en un sobre que mostró a la víctima. La vecina de Vitoria también accedió a sacar dinero, por lo que la acompañaron hasta una sucursal de donde extrajo 3.200 euros.
Dado que no pudo conseguir todo el dinero que quería, se desplazaron hasta otra oficina para sacar otros 3.200 euros. De nuevo en el vehículo, la timadora comentó que se sentía mareada. Acto seguido, su compinche paró junto a un bar y pidió a la víctima que fuera a comprar un bocadillo. Tras realizar el encargo, al salir del establecimiento hostelero, la mujer se percató de que la pareja había abandonado el lugar llevándose el dinero y el bolso que había dejado en el coche. Fue entonces cuando cayó en la cuenta de que había sido víctima de un timo.
Así lo explicó en la denuncia que formuló en las dependencias policiales de Agirrelanda. A partir de ese momento, la Policía Local abrió una investigación que se prolongó durante dos semanas. Las pesquisas permitieron el esclarecimiento de los hechos, así como la identificación de los supuestos estafadores. Agentes y víctima repitieron el recorrido realizado con los timadores y revisaron las cámaras de videovigilancia de los lugares por donde pasaron.
Tras identificar el vehículo utilizado para cometer el timo, lograron descubrir también el nombre de su titular. Poco después, agentes de la Policía Local de Vitoria se pusieron en contacto con otros cuerpos policiales y descubrieron que el matrimonio investigado, perteneciente a otros clanes de estafadores, había sido detenido hasta en cuatro ocasiones por otros hechos similares.
En este sentido, el varón cuenta en su expediente con una decena más de detenciones, entre ellas una llevaba a cabo en 1998 en la capital alavesa por el mismo motivo. Además, en 2014 ambos fueron investigados por otro supuesto timo también registrado en la capital alavesa, aunque la investigación fue sobreseída porque la víctima alegó problemas de visión e incapacidad para reconocerles.
En cambio, en esta ocasión la mujer, de 79 años, los pudo identificar en un álbum fotográfico. Con todo este trabajo y, sobre todo, gracias a la denuncia los agentes completaron las correspondientes diligencias que se trasladaron al Juzgado de Guardia.
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