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Julio César Rico
Lunes, 18 de marzo 2024, 12:41
El largo proceso de desmantelamiento de la central nuclear de Garoña avanza poco a poco. Van a ser cerca de diez años de trabajos que se empiezan a concretar y que contarán con el protagonismo de empresas burgalesas. Así, la compañía Copsa se va a ... encargar de la construcción de un almacén de grandes piezas desclasificables y de un edificio de desclasificación en la central. La constructora, con sede en Burgos, se va a encargar también de la redacción del proyecto. Tras el levantamiento, también llevará a cabo las pruebas de puesta en servicio de ambos edificios en la cercanía de la central.
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Este contrato de la fase 1 del desmantelamiento de la central nuclear, situada a unos 40 kilómetros de Vitoria, es uno de los más cuantiosos. La constructora burgalesa va a invertir 2.490.301,73 euros, con impuestos incluidos. Enresa lo había licitado por 2.966.148 euros.
Copsa tendrá que redactar un proyecto constructivo que entra en el total del contrato y que constará de dos edificios separados, colindantes, con estructura y cerramientos independientes y cimentación común, denominados almacén de desclasificables y edificio de desclasificación. Enresa justifica la construcción de estas dos infraestructuras en que el desmantelamiento de la nuclear «va a generar una importante cantidad de materiales desclasificables como consecuencia del desmontaje del edificio de turbina y de su acondicionamiento posterior como instalación de apoyo al resto de los trabajos de desmantelamiento».
Se trata de unos espacios en los que se han de almacenar grandes piezas metálicas de hasta 25 toneladas de peso, bloques de hormigón de unas cuatro toneladas y en contenedores de tipo CMT de hasta dos toneladas, los más comunes para el bloqueo de residuos radioactivos. Para gestionar estos materiales es necesario disponer de una instalación con capacidad suficiente para almacenarlos.
Parte de estos materiales guardarán radiactividad, razón por la cual tanto desde el punto de vista radiológico, como desde el punto de vista físico y estructural, deben cumplir con instalaciones anejas para realizar los procesos para la desclasificación de los materiales.
Está previsto que el desmantelamiento provoque la generación de más de 4.000 toneladas de chatarra y desechos radiactivos que hay que tratar y desclasificar.
Copsa deberá realizar la redacción del proyecto de ejecución del almacén de grandes piezas, el replanteo topográfico de la zona, la ejecución de la obra de construcción, los ensayos, pruebas y puesta en marcha de todos los elementos e instalaciones que la componen.
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