Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Los expertos tenían indicios para creer en la existencia de un asentamiento neolítico-calcolítico en Tobera (Berantevilla), pero los resultados de una nueva prospección magnética corroboraron las sospechas iniciales con creces. En los resultados preliminares «se han detectado abundantes estructuras lineales, decenas de ellas circulares, ... que de momento hemos interpretado como cabañas de unos 10-20 metros de diámetro. También se han reconocido infinidad de estructuras puntuales como pozos o fosos y otras desconocidas», explicó el geólogo vitoriano Andoni Tarriño.
La prospección magnética, realizada entre septiembre y octubre en una finca rústica del paraje de 'Los Cascajos' (Tobera), ha confirmado la existencia de una aldea prehistórica al sur de Álava. «Por la morfología de las cabañas se intuye que es neolítico, pero podría ser del Neolítico-Calcolítico. Con los datos que tenemos podríamos datarlo entre 6.000 y 4.000 años de antigüedad, por lo que es uno de los escasos poblados de esta cronología hallado hasta el momento en el País Vasco», ha señalado Tarriño.
El estudio, dirigido por este geólogo vitoriano, que desarrolla su labor en el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), completa los datos obtenidos la pasada campaña.
En el lugar del asentamiento ya se habían encontrado diversos materiales como sílex, cerámica e incluso hachas pulimentadas, recogidos en las prospecciones arqueológicas superficiales realizadas en la década de 1980. Por ello, se decidió recurrir al prestigioso geofísico alemán Helmut Becker para realizar una prospección magnética con la intención de desentrañar del subsuelo de Álava vestigios de los primeros poblados de la zona.
Noticia Relacionada
De esta forma, el análisis, financiado por la Diputación alavesa, con el apoyo del CENIEH y de la UPV, ha permitido identificar las anomalías magnéticas producidas en el terreno por el poblado prehistórico que ocupaba una superficie total de «unas 9 hectáreas (9 campos de fútbol)», detalló el investigador alavés.
Este asentamiento «probablemente está relacionado con las explotaciones prehistóricas de minería de sílex existentes en la Sierra de Araico, en concreto con la cantera de Pozarrate», ha indicado Tarriño, que ha contado para este estudio con la colaboración de los arqueólogos Mikel Aguirre (UNED, Bergara) y Anne-Sophie Flade-Becker.
Esta mina a cielo abierto, estudiada desde hace años, se encuentra en Treviño, a sólo 2 kilómetros en línea recta del poblado localizado en Tobera. «Su interesante y singular situación abre la posibilidad de realizar una actuación arqueológica en el poblado que constate los datos geofísicos y que nos permita, además, datarlo de forma absoluta», indicó el director del equipo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.