Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
También el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) considera que el nombramiento de Roberto García Tobalina como comisario de la Policía Local no se ajustó a la norma. Ayer, esta sala declaró «nulo» su nombramiento, ratificando a grandes rasgos la sentencia emitida el ... año pasado por el Juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de Vitoria, sala que entendió la existencia de «una utilización fraudulenta» al no convocarse un concurso interno de méritos, lo que discriminó a una aspirante mejor cualificada.
Aquella designación irregular en la Guardia urbana data de abril de 2022, cuando el cuerpo dependía del PSE en el Gabinete Urtaran -hoy es competencia del PNV-. El ahora señalado llevaba en el cargo desde 2018 «en comisión de servicios». Al ser ascendido de suboficial a oficial, el departamento -entonces dirigido por Marian Gutiérrez- le reeligió como máximo responsable de la comisaría de Aguirrelanda sin abrir la convocatoria a otros candidatos de igual rango. Fue una especie de actualización de nombramiento. En este punto reside el origen de esta pugna judicial. Porque, tras no poder optar al puesto, una perjudicada, la subcomisaria Marian Vidaurre, decidió acudir a la vía judicial de la mano del sindicato ELA.
Noticia relacionada
Dos años después, el TSJPV abunda en que esa plaza capital debe ser convocada con «transparencia», atribuyendo al Ayuntamiento vitoriano «un abuso de poder», siempre según la central sindical. Eso sí, este tribunal con sede en Bilbao ha descartado una «discriminación por razón de género», como sí entendió en su momento el Contencioso-Administrativo 1 de Vitoria.
Tras esta nueva victoria judicial, la central sindical instó al Gabinete Etxebarria, que heredó esta situación del anterior equipo de gobierno, a que «no agrave más la situación y ejecute de una vez la sentencia para nombrar al futuro comisario o comisaría mediante un proceso transparente, y dando opción de participar a todos los trabajadores que cumplan los requisitos». Desde el Departamento de Seguridad, un portavoz autorizado aseguró que, a última hora de la tarde de ayer, todavía no había llegado ninguna comunicación oficial sobre este espinoso asunto. Hasta que no puedan estudiar el texto legal seguirán con el actual organigrama en la comisaría de Aguirrelanda. El fallo, estiman fuentes judiciales, «llegará mañana (por hoy) como tarde».
Sea hoy u otro día, la realidad habla de un tercer varapalo judicial en este asunto para el Consistorio. A estas dos sentencias habría que añadir otro auto desvelado en la mañana de ayer por EL CORREO, donde el Contencioso-Administrativo 1 urgió al «cese inmediato» de este mando hasta que llegara el fallo del TSJPV. Con su anuncio de ayer, esa suspensión temporal no se ejecutará.
Noticia relacionada
David González
¿Cuál será entonces el próximo capítulo? Una vez se reciba la resolución del TSJPV a la plaza de España, al Gabinete Etxebarria y al Departamento de Seguridad en particular le quedarán dos alternativas. Por un lado, recurrir esa sentencia a una instancia superior. Es decir, el Tribunal Supremo. Se antoja una opción secundaria debido a que en esta materia no suelen prosperar los recursos. Sí podría servirles como táctica para ganar tiempo. Al menos medio año.
En el supuesto de que Seguridad y Función Pública decidan hacer suyos estos mandatos judiciales -ninguno firme todavía-, deberían acometer un nuevo concurso de méritos para optar a la preciada plaza de comisario. Esa promoción interna debería ser «abierta, pública y transparente». Hasta podría optar el propio García Tobalina. De renunciar, las candidatas naturales para sucederle serían la litigante, Marian Vidaurre, y otra subcomisaria, Silvia Rodríguez. La primera, de 55 años, lidera en la actualidad el área de Tráfico y se ha curtido en los despachos de Aguirrelanda. Con un perfil similar, la segunda suele ejercer de enlace en las reuniones con otros cuerpos policiales. De ella penden Investigación y Menores, dos unidades fundamentales.
Por cierto, también resuelve el TSJPV que a la demandante se «le abonen los salarios y complementos que le corresponderían como jefa de la Policía Local desde el 1 de abril de 2022 hasta la resolución del concurso».
Todo apunta a la complicada continuidad en el cargo de comisario de la Policía Local de Vitoria de Roberto García Tobalina. Ya sea porque el Ayuntamiento se vea obligado a acometer el «cese inmediato» exigido por el Juzgado Contencioso-Administrativo 1 o porque el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) avale en breve la primera sentencia, que data de febrero de 2023.
Quedaría la opción de que este mismo órgano, con sede en Bilbao, anulara aquel primer fallo que hablaba de una elección a dedo y «fraudulenta». Entonces todo seguiría como hasta ahora. Sin embargo, fuentes judiciales recuerdan que «no es habitual que el TSJPV rechace este tipo de sentencias, pero todo es posible y más en un asunto tan capital como este».
Perfiles similares
En todo caso, el posible relevo de Tobalina cuenta con dos candidatas naturales. Ambas subcomisarias y curtidas en los despachos de Aguirrelanda. Se trata de la litigante, Marian Vidaurre, de 55 años, y de Silvia Rodríguez, nacida en 1973 y criada en el barrio de Txagorritxu. Los otros dos subcomisarios -por «edad», sobre todo- parecen fuera de esa carrera por encargarse la siempre compleja comisaría de Aguirrelanda.
Vidaurre lideró en su momento un turno de noche. Pasada esa fase de contacto directo con la calle, ahora dirige la importante área de Tráfico. Rodríguez, con dos hermanos policías, ha gestionado la unidad de denuncias. En la actualidad penden de ella Investigación y Menores, las dos joyas de la Guardia urbana.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.