Un jacuzzi en un colegio de Vitoria

El colegio lleva años aplicando en su enseñanza la metodología holandesa de 'snoezelen', que se trata de un espacio multisensorial donde los pequeños pueden desarrollar todos los sentidos. La estimulación acuática es una continuación de este plan. «Nos pareció interesante implementarla, aunque solo la encontrábamos en contextos donde los pequeños tenían algunas dificultades de desarrollo, nosotros lo diseñamos para todos los alumnos», ha explicado Yolanda Martínez, una de las directoras del centro.

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Sensación de relajación, bienestar, estimulación activa, desarrollo de la musculatura, mejora de la psicomotricidad... son algunos de los beneficios que ofrecen los ejercicios acuáticos. Los pequeños se sumergen de uno en uno para «poder ofrecerles una atención personalizada y responder a sus necesidades y ritmo», van acompañados de un profesor de educación infantil. Estos han recibido una formación intensa en el ámbito de estimulación acuática durante una semana para poder acompañar a los pequeños. «Lo más importante es que pertenezcan al mundo educativo y tengan contacto con los pequeños, es esencial para acompañarlos durante estos ejercicios», ha subrayado Pilar Torres, pedagoga y asesora del colegio en esta iniciativa.

El spa acuático está basado, tal y como señalan, en teorías pedagógicas. «Los especialistas aconsejan que los pequeños de cero a hasta los tres años estén en constante estimulación, es fundamental para su desarrollo», ha especificado Torres. Con actividades en el agua, es la forma «más completa» de hacerlo. «Se desarrollan a nivel cognitivo y trabajan todos los sentidos».

La utilización de estas instalaciones depende de las necesidades y edad de cada niño, pero en principio está previsto para una o dos veces a la semana. «Es un abordaje universal, para todos los pequeños, pero los que tienen algún tipo de necesidad especial, el spa le servirá para hacer hidroterapia, lo cual es muy importante», ha subrayado Torres. Los pequeños, aunque puede que a algunos les de miedo al principio, disfrutan de esta actividad, tanto que luego cuesta sacarlos. Torres ha querido recalcar que dentro del plan también está como objetivo que pierdan ese temor a estar en el agua.

Desde el colegio inciden en la importancia del mantenimiento de las instalaciones. «Para nosotros es importante que todos los padres tengan la certeza de que los spas son un lugar seguro, que cumplen con las condiciones de higiene». Yolanda Martínez ha explicado que varias personas del centro, las que estarán en la sala acuática, realizarán un curso oficial de legionella «para que puedan encargarse de la desinfección, temperatura del agua, entre otras labores de cuidado y seguridad».