Un informe foral pide a Statkraft que su parque eólico en Aramaio se aleje de Urkiola

Si bien será el Ministerio quien finalmente decida, los funcionarios de la Diputación valoran en el texto al que ha tenido acceso EL CORREO cada uno de los molinos y finalmente piden que se prescinda del molino más cercano al parque natural de Urkiola, que está a apenas a 1,25 kilómetros de distancia. Este punto concreto, que se encuentra entre las cimas de Atxuri y Zireta, cuenta con poblaciones asentadas de buitre leonado, halcón peregrino y alimoche, además suelen recibir visitas de águilas reales y quebrantahuesos. Al parecer, la firma nórdica ya ha remitido al ejecutivo alavés un nuevo documento para que lo vuelvan a valorar sus técnicos.

«La instalación de este aerogenerador supondría un riesgo extremo de desaparición de la pareja más cercana de alimoche -y también para otras necrófagas que habitan este entorno- y al ser ésta una zona de gran atractivo para la comunidad de rapaces rupícolas, a corto plazo supondría también un riesgo de que se generase lo que se conoce como 'efecto sumidero'», apunta el informe en referencia a la posible pérdida sucesiva de ejemplares adultos que provocaría un «importante desequilibrio demográfico».

«Cabe señalar que instalar aerogeneradores muy próximos a los nidos donde nacen las crías de alimoche supone un riesgo muy elevado de ser atropellados por las palas, puesto que los pollos volantones durante este periodo son muy inexpertos y tienen una capacidad de vuelo limitada», detalla el texto de los técnicos que, además, plantea que debe conservarse un «bosquete de hayas trasmochos» para evitar que se produzca «una pérdida de naturalidad muy relevante».

No sólo eso. También se analizan los posibles efectos negativos sobre las rutas senderistas y de montaña, ya que se encuentra al pie de ascensiones tan conocidas y populares como Orixol y Santikurutz. Además, en esa misma zona se encuentra junto a la ermita San Cristóbal de las Cruces de Arangio, la llamada 'puerta desde Álava' al parque natural de Urkiola. «En este caso, en el aerogenerador número 1 cabe valorar que serían muy notables los impactos paisajísticos, ya que al encontrarse a una cota elevada en relación con el valle de Aramaio sería muy visible desde muchos puntos de importante acumulación de observadores», sostiene.

Hasta cierto punto, todo esto era previsible porque entre las alegaciones de la Diputación al plan territorial sectorial de energías renovables (el conocido como PTS) que publicó en exclusiva este periódico ya se indicaba que «en el Alto de Krutzeta en base a los criterios avifaunísticos y de permeabilidad ecológica que se vienen exponiendo, se estima que debería excluire del desarrollo eólico que se propone en el PTS al menos la parte localizada al Oeste de la carretera A-2620». Es decir, donde se encuentra este molino que ahora se pide eliminar.

Pero la Administración foral también reclama a Statkraft que estudie «detenidamente» la localización precisa de otros dos 'gigantes de viento'. No se descartan como en el caso anterior, sino que se pide un cambio de localizaicón exacta. Uno porque en su vial de acceso se ha detectado «la presencia de al menos dos ejemplares de hayas trasmochas, muy longevas, que podrían afectarse directamente por las actuaciones proyectadas de ensanchamiento de los actuales caminos existentes». Además, afectaría a la ruta senderista GR-121 'Vuelta a Gipuzkoa'.

El segundo es el molino que se planea para la cima de Markamintegi por estar a una altitud más elevada con respecto al resto, 718 metros a los que habría que sumar otros 201 en el caso de que el proyecto se llevase a cabo como inicialmente se planea. Por eso, se plantea reducir el tamaño del aerogenerador -algo que afectaría directamente a su potencia y por lo tanto poco probable- o desplazarlo unos metros para que dejase de ser visible desde Ibarra (Aramaio).

El estudio de 34 páginas que se ha enviado al Ministerio también entra a valorar las distintas alternativas sobre las líneas de evacuación. En este caso, se apuesta por la solución que va «en paralelo a la infraestructura del Tren de Alta Velocidad ya construido, es decir, por zonas ya antropizadas por las que se minimizan efectos medioambientales y se favorece su mimetización paisajística».