Las cubiertas de la nave y de la torre están gravemente dañadas y el agua se filtra al interior. Gabriel Castaño

La iglesia de Sáseta entra en la lista roja

La asociación Hispania Nostra lanza un SOS para salvar del derrumbe el templo de San Esteban, del que es propietario el Obispado de Vitoria

Lunes, 8 de abril 2019, 01:06

A la España vaciada se le caen a cachos edificios de varios siglos de antigüedad e incalculable valor patrimonial, cultural y sentimental. Y pese a los lamentos de sus vecinos, ninguna administración hace nada. Esto ocurre en Sáseta, una aldea que pertenece al Condado de Treviño, y de cuya espiritualidad y sacramentos se encarga desde hace lustros el Obispado de Vitoria. Es propietario de la iglesia de San Esteban, un templo con nave románica y torre rural de estilo barroco, que conserva restos del siglo XI y que se desplomará un día de estos si nadie lo repara. Acaba de entrar en la lista roja de Hispania Nostra, una asociación dedicada a la defensa y conservación del patrimonio. Significa que puede desaparecer.

Publicidad

«Un pueblo sin iglesia pierde su identidad y su historia», defiende Gabriel Castaño, uno de los vecinos que han logrado que Hispania Nostra se haga eco de un problema contra el que llevan años clamando en el desierto. Sáseta es uno de los primeros núcleos urbanos que se fundaron en el condado. Estuvo a punto de convertirse en un pueblo fantasma hace unos años, pero logró renacer por el impulso de los residentes y sus hijos que rehabilitaron las viviendas.

Hoy viven allí una decena de habitantes que administrativamente dependen de Burgos. Cada fin de semana decenas de vitorianos visitan el pueblo y sus cascadas, broche del hermoso paseo por el desfiladero del río Ayuda desde Okina. A la iglesia no se pueden ni acercar. Su entrada está vallada por riesgo de desprendimientos y sus tesoros acumulan polvo y humedad bajo llave.

Escena de un retablo con la policromía muy dañada. G. C.

Micaella Portilla

La última misa se celebró allí hace 30 años. Fue un bautizo. Desde entonces se cerró al culto y durante años ha sido pasto del abandono y los expolios. Nadie sabe lo que ha desaparecido de su interior, pero sí tienen catalogado e inventariado lo que queda de un edificio que presenta varias fases constructivas, desde restos prerrománicos del siglo XI, una nave románica del XIII, una preciosa bóveda estrellada gótico-renacentista (siglos XV y XVI) y su torre rural barroca del XVIII. La gran Micaela Portilla así describe el templo en su Catálogo Monumental de la Diócesis de Vitoria de 1968.

Hoy hay que añadir a esa ficha años de declive y deterioro. Ha perdido parte de la cubierta y el agua y la nieve están haciendo mella en los retablos que aún conserva. El mayor, dedicado a San Esteban, es de madera. Presenta afecciones por la humedad y el ataque de xilófagos. En las tallas de los evangelistas se aprecia también una gran pérdida de policromías. Además, las ventanas están rotas y hay restos de deposiciones de roedores. El santo titular ha sido trasladado al centro social del pueblo para protegerlo de la humedad. Y allí está junto a las tallas de San Miguel, San Vicente o la Virgen del Rosario de los otros retablos, esperando a que alguien las restaure.

Publicidad

Bella bóveda estrellada gótico-renacentista. G. C.

Portilla catalogó su pila bautismal románica. La copa semicircular es lisa pero su pie prismático tiene labrada una escena medieval de juglares. La sacristía está asimismo arruinada y paredes y torre presetan grietas. Los vecinos han tratado de lograr ayudas para su reforma, pero no han tenido éxito. El Obispado de Vitoria, que cada año dedica un presupuesto junto a la Diputación alavesa para rehabilitar iglesias, aseguró a EL CORREO que no está en sus planes intervenir en la de Sáseta. Así que en el pueblo empiezan a darle vueltas a la imaginación. A falta de un mecenas, se plantean lograr fondos mediante 'crowfunding' o microaportaciones solidarias. «Se nos ha ocurrido vender simbólicamente las tejas para reponerlas por nuevas». Todo por conservar su historia.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad