Foronda mantiene su pulso carguero con hasta 30 vuelos al día

En medio de la pandemia que está vaciando de pasajeros los aeródromos por toda la geografía nacional e internacional, la pista de La Llanada es en estos momentos la terminal más activa de su entorno. Vitoria, única base H-24 de la zona, contabiliza actualmente un mayor número de operaciones que el aeropuerto de Bilbao, que agoniza estos días por el impacto del coronavirus con apenas 6 vuelos diarios cuando en condiciones normales suele contabilizar más de 120.

La pista vitoriana, la cuarta infraestructura aeroportuaria que más mercancías mueve a nivel nacional –en febrero rozó las 5.000 toneladas–, cobra especial importancia en estos momentos de crisis sanitaria por la posibilidad de recibir aviones con material sanitario o suministros para actividades industriales y económicas de primera necesidad. «Estamos abiertos para cualquier necesidad», trasladan desde el aeródromo. Es el cometido de firmas como DHL, cuyo 'hub' manipula el 90% de la carga que llega a Foronda. «La operativa aérea está funcionando bien», señalan desde el gigante de la paquetería.

Mientras el pulso carguero se mantiene, los pasajeros han caído en picado tras suprimirse las pocas conexiones –todas de Ryanair– que mantenía la terminal en una campaña invernal (que en la aviación comercial va de octubre a marzo) a medio gas.

No hay rastro de pasajeros en la base vitoriana salvo excepciones como la que protagonizaron las tropas españolas procedentes de Irak que aterrizaron en un Boeing 787 de Air Europa el pasado domingo. Se dio la coincidencia de que en la misma jornada el Regimiento Nuclear, Biológico y Químico nº1 de Valencia (NBQ) del Ejército llegó a la pista alavesa para tareas de desinfección frente al coronavirus.

En cuanto a vuelos regulares, la operativa que enlaza Vitoria con Milán/Bérgamo, una de las zonas del país más castigadas por la enfermedad, se anuló casi al mismo tiempo que el Gobierno canceló todos los vuelos entre España e Italia. Después se suspendieron los vuelos con Sevilla. La aerolínea tenía previsto iniciar nuevas rutas a Málaga y recuperar las de Colonia y Palma desde abril, algo que también se ha pospuesto.

Por ahora permite comprar billetes en mayo, aunque todo dependerá de la evolución del estado de alarma. Binter, que preveía arrancar en abril sus vuelos a las islas Canarias, también suspendió la programación, aplazándola de momento a junio. A eso se suma la supresión de todos los chárter que estaban programados para Semana Santa.