La decisión de la Diputación de ampliar el tiempo de clausura de los centros de día y la vuelta de las limitaciones de las visitas a las residencias no ha sentado bien a parte de las familias usuarias de estos recursos en Álava. Más de ... una treintena de personas protagonizaron una concentración este sábado en la plaza del General Loma bajo el lema '¡No al aislamiento de nuestros mayores!' para pedir «que se tengan en cuenta las necesidades» de sus familiares. Piden, en definitiva, medidas concretas para cada centro y no aplicar restricciones de brocha gorda.
Publicidad
«Estuvimos tres meses confinados y los ancianos lo sobrellevaron como pudieron. Algunos no pudieron salir ni de las habitaciones de sus residencias. No lo pasaron bien», explica una de las portavoces de este colectivo, que prefirió guardar el anonimato. Hasta la fecha estas familias se habían dirigido a nivel particular a departamentos forales y municipales, pero no habían llevado a cabo una protesta conjunta.
Tras las restricciones impuestas durante el estado de alarma las residencias reabrieron sus puertas el 8 de junio. «La reapertura fue lenta y se produjo de forma temerosa. Teníamos un día de visita a la semana. Los encuentros se producían dentro de la residencia y no teníamos permitido salir a jardines o parques», recuerdan los familiares. Residencias como Ajuria, de titularidad foral, aún mantienen precintados sus bancos y zonas verdes.
«Nosotros somos los primeros interesados en cuidar de nuestros padres y familiares. Queremos protegerles del Covid-19 y nos cuidamos para hacerlo. No creemos que el peligro esté en nosotros o las residencias, porque todos guardamos escrupulosamente las medidas de seguridad e higiene. El problema está en otro lado. Claro que si no les mata el virus les va a matar la soledad», insisten estas familias. Las condiciones de las visitas varían entre los distintos centros, pero en general se están desarrollando con un solo familiar, una hora de duración, mascarillas, guantes y todas las medidas de higiene.
Publicidad
«En las últimas dos o tres semanas pudimos salir a pasear con ellos, cogerles de la mano. Tener otro tipo de interacción. Ya han estado bastante tiempo encerrados, pero el día 18 volvieron las restricciones», lamentan estas personas que señalan que, mientras se intenta reactivar la hostelería y el turismo, sus mayores no pueden disfrutar de los rayos del sol durante unos minutos.
'¡El aislamiento es sufrimiento!' fue una de las consignas que repitieron el sábado los asistentes a la concentración mientras, unos metros más allá, la Catedral Nueva acogía un homenaje a las víctimas alavesas del Covid-19. «Queremos que se aborde la salud de nuestros mayores de una forma más general. La salud no es sólo librarlos de padecer enfermedades. Consiste en sentirse queridos, poder ver a sus familiares, nietos y hermanos. Sentir que son relevantes y que le importan a alguien», insisten.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.