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Del centro de la capital alavesa al polígono industrial de Betoño. La próxima primavera, probablemente ya para marzo o abril como tarde, la tramitación del DNI y del pasaporte se trasladará a la comisaría que la Policía Nacional tiene en la calle Oñati. Esta mudanza ... temporal responderá a la profunda reforma que le aguarda al edificio de la calle Olaguíbel.
Los trabajos podrían durar unos veinte meses. Y de cumplirse estas previsiones, esta gestión básica se desarrollará ese tiempo en el bloque de Betoño, que ya alberga los trámites de extranjería. En la actualidad, este cuerpo policial expide una media mensual de 5.000 DNI y mil pasaportes en su sede vitoriana.
La reforma de Olaguíbel consistirá en la «rehabilitación y mejora de la accesibilidad» del edificio. En palabras del subdelegado del Gobierno, Javier Sáez lanas, «en esta obra integral se van a vaciar los edificios de los antiguos juzgados y el de la comisaría, respetando los elementos arquitectónicos protegidos, y se va a hacer un solo edificio que cumpla todos los estándares actuales en cuanto a accesibilidad se refiere y donde se pretende albergar a las unidades policiales de la Comisaría Provincial y oficina del DNI y pasaporte».
Hasta la fecha se han acometido los trabajos de vaciado del edificio. Con el proyecto de obra casi culminado, en próximas fechas «se procederá a la licitación de las obras y a la posterior adjudicación» del proyecto.
Esa fase previa ralentizará el inicio de la reforma hasta «principios del próximo verano». O sea, junio. Un poco antes, en «marzo o abril» el servicio actual de tramitación del DNI y el pasaporte se reubicará en la sede de la calle Oñati. Seguirá allí «hasta que finalicen las obras de rehabilitación del edificio de Olaguíbel».
Las fechas, no obstante, aún pueden bailar y dependerán del progreso de la fase de adjudicación de los trabajos. «Cuando esto se produzca se informará a la ciudadanía. Se tiene previsto que las obras comiencen en mayo-junio, por lo que el traslado sería en marzo-abril, depende de cómo se desarrolle la licitación», recalcan desde la Subdelegación del Gobierno en Álava.
Debido a que se trata de unos trabajos de enorme calado, su conclusión se prevé para «finales de 2023». Por lo tanto, la mudanza de este servicio público básico podría alargarse durante unos veinte meses.
La rehabilitación contendrá asimismo un componente simbólico. Aparte de la modernización interna del céntrico inmueble, el escudo franquista ubicado en lo alto de su fachada «se sustituirá por uno similar al que hay ahora en la fachada de la Subdelegación, al principio de la calle Olaguíbel».
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