Un estudio asegura que los coches tardan un 20% menos en cruzar el Sur de Vitoria que hace un año

El documento, que será analizado hoy por los grupos políticos y los técnicos del Ayuntamiento en la mesa de trabajo de tráfico, asegura que las medidas que se han introducido en el último año han sido «efectivas». De hecho, subraya que han «logrado reducir los tiempos de trayecto y la congestión» en esta zona, que se había convertido en uno de los principales puntos negros de la ciudad tras la implantación del BEI y el crecimiento de los barrios del entorno.

El informe recaba los datos del sistema GPS de los vehículos y realiza una comparación con los tiempos que marcaban los coches antes de que se introdujeran las llamadas «medidas quirúrgicas». Estas modificaciones abarcan desde pequeños retoques como la apertura de la Avenida de San Prudencio hasta los desdoblamientos de Tanis Aguirrebengoa y Zumabide-Maite Zúñiga. Es decir, analiza sobre todo el tiempo de trayecto en sentido este-oeste, con la saturada rotonda de Esmaltaciones como punto de partida y en dirección a La Antonia.

El estudio se fija en los desplazamientos que se realizan entre las 6.00 y las 22.00 horas de lunes a viernes y extrae la duración media del viaje, ya que la densidad del tráfico se reduce de manera drástica durante la madrugada y los fines de semana. El tiempo medio de cruzar la zona Sur de este a oeste se ha reducido en un 18% desde que se aplicaron las mejoras en la circulación, pese a que el volumen de vehículos se mantiene.

De manera más concreta, los tramos que más se han agilizado (cerca de un 25%) incluyen Tanis Aguirrebengoa, Portal de Lasarte y la calle Caserío. En este sentido, el informe concluye que los desdoblamientos de Zumabide-Maite Zúñiga y Tanis Aguirrebengoa han jugado un papel importante en esta reducción de tiempo. El coste de las intervenciones ronda los 450.000 euros.

El tiempo total que gana de media el conductor respecto a lo que tardaba en cruzar el Sur hace un año se traduce en algo más de un minuto. «Se ha pasado de 365 a 299 segundos en la duración media del trayecto Esmaltaciones-Tanis Aguirrebengoa», recoge el informe. Es decir, pasa de seis minutos y cinco segundos a cuatro minutos y 59 segundos para completar cerca de 3,2 kilómetros.

La diferencia, sin embargo, se hace más evidente al comprarla con el sentido inverso, donde las actuaciones se han reducido a una «regulación semafórica». Las mejoras en los tiempos son testimoniales en esta zona. Un conductor necesita 7 minutos para atravesar el Sur con destino Esmaltaciones (sólo 13 segundos menos que hace un año).

A pesar de que el informe no es concluyente, ya que busca presentar una radiografía actual para la mesa de trabajo del Ayuntamiento, afirma que la reducción del tiempo de trayecto es «significativa» en la zona Sur y califica de «efectivas» las medidas adoptadas. Las apreciaciones, por tanto, alejan la posibilidad de construir una nueva carretera para aligerar el tráfico. De hecho, la alcaldesa, Maider Etxebarria, da prácticamente por «descartada» esta opción en la presente legislatura.

En una línea similar se muestra ahora el concejal de Tráfico, Iñaki Gurtubai (PNV). «Una carretera nueva sólo puede hacerse con un consenso amplio, que en este momento no existe», reconoce a este periódico. Además, existen otras medidas en proceso de análisis, como la eliminación de un carril del BEI para dársela a los coches en el Paseo de la Zumaquera y Salvatierrabide.

La posibilidad de construir un vial y aprovechar los fallidos túneles de Armentia surgió al final de la pasada legislatura y marcó buena parte de la campaña electoral municipal. Sin embargo, se trata de una infraestructura que no está contemplada en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que necesitaría una modificación de calado. Esta circunstancia podría incluso sepultar el apoyo político que tiene el documento urbanístico de cara a su aprobación definitiva, ya que sólo cuenta con el aval de Elkarrekin Podemos en la oposición.

Por otro lado, el estudio de alternativas que se conoció el pasado verano para resolver el tráfico del Sur, que se congestionó aún más con la implantación del BEI, planteaba tres principales soluciones: esperar al soterramiento del ferrocarril, crear un nuevo vial o profundizar en las mejoras de la red actual. El Gabinete Etxebarria ha optado por esta última vía antes de apostar por una nueva infraestructura debido a su impacto ambiental.