Operativo en Vitoria por un posible yihadista llegado de Francia

Al mediodía de hoy, este ciudadano llegado de Francia ha abandonado las instalaciones de la Policía autonómica en Arkaute, a donde había sido trasladado «como requerido» para comprobar su identidad real.

La alerta ha saltado cerca de las tres de la mañana, cuando se han cargado los datos de los establecimientos hosteleros de la capital alavesa. Al cruzar las identidades, la de I. D. ha precipitado un dispositivo de captura. Y es que su nombre y pasaporte -tunecino, según algunas fuentes- revelaban su presunta implicación con el terrorismo islamista.

El sospechoso contactó ayer por teléfono con la pensión. En un principio iba a llegar a Vitoria sobre las 21.30 horas, aunque finalmente apareció poco antes de las 23.30 horas. No llamó la atención en ningún momento. «Para nada .Ha sido muy simpático en todo momento», comentan desde el establecimiento vitoriano. Alquiló una habitación por un día. «Sólo dijo que venía de Francia y cogió una noche únicamente». No dijo a dónde se dirigía, extremo que se está investigando.

I. D. se metió en su habitación a descansar sin relacionarse con el resto de los huéspedes. Para las cinco de la mañana, el bloque donde se ubica la pensión estaba rodeado por furgonetas de la Brigada Móvil, del PRI, de la unidad de Intervención y de coches camuflados de la Ertzaintza. Pasadas las seis de la mañana, una patrulla de agentes de paisano ha subido al establecimiento hostelero, situado en una primera planta. Estos policías han cogido la estancia pegada a la del sospechoso a la espera de que éste se levantara.

Cuando el sospechoso se ha levantado, poco antes de las siete, al salir al pasillo se ha encontrado con estos dos agentes. «Y casi de inmediato con otros 6 u 8 que han entrado a por él. Ni se ha movido», revelan desde la pensión.

De allí, ha sido trasladado a las instalaciones de la academia de Arkaute, que sirven también de sede para varias unidades de la Ertzaintza. Desde la Policía autonómica han podido comprobar su identidad y que no se trataba de ningún terrorista. Y es que la alarma ha saltado al señalar a este huésped como un «excombatiente en Siria» de origen tunecino pero con pasaporte francés.