Ensaladillas rusas que sorprenden en Vitoria

Ahora que parece que llega el buen tiempo, la ensaladilla rusa es la tapa ideal y hay quien innova con ingredientes que enriquecen su sabor. Es el caso de KlanDestino (Pio XII, 16) que suma la anguila ahumada a la fórmula, pez que funde toda su grasa, aportando mucho sabor y melosidad a la propuesta. El toque exótico lo pone el kimchi, alimento coreano de sabor salado y picante. La que se ha colado entre las diez mejores del país es la del PerretxiCo (San Antonio, 3), destacada en el top ten en el Concurso Nacional San Sebastián Gastronomika. La buena mano del local se nota en el plato elaborado con patata alavesa, zanahoria de cultivo propio en su huerto de Manzanos (un pequeño pueblo de la provincia), bonito Ortiz pescado a caña, huevos Eusko Label y el llamado 'talochip' que contribuye a su original presentación.

En el Restaurante Kirika (Alto de Armentia, 24) apuntan alto. Su ensaladilla rusa tiene nombre propio. Ubicado al lado de Pádel Pista Norte, el lugar goza de un ambiente muy agradable, ideal para degustar un capricho realizado con productos de primera calidad. También es casera la de Mano Lenta (Tomás Alfaro 11) y la del Tabanko (Correría, 46), esta última servida con gambas, un toque de perejil, picos y una presentación sobresaliente. Muy rica. En el mismo Casco Medieval, a pocos metros, frente a la singular iglesia de San Pedro y en un emplazamiento de postal, está el Neptuno (Pedro Egaña, 4). Allí se respira mar y sugieren una ensaladilla artesanal con patata alavesa, bonito en conserva, huevo de caserío y mayonesa con aceite de oliva virgen extra. Una tapa de esas que dejan huella, como la de Mano Lenta.

Viejas y nuevas complicidades se celebran frente a una mesa o en la barra de Le Basque (Plaza del Matxete, 2), y una de sus especialidades es la ensaladilla rusa. Se puede saborear en formato tapa o ración. Con cebolla encurtida y unos picos de categoría. Y, como es costumbre en el lugar, siempre bien acompañada con una buena banda sonora. Hasta el chef belga Lucien Olivier bailaría al son de su música. Tomarse un verdejito con una tapa de su famosa ensaladilla rusa es un placer en el Bar Toloño (Cuesta de San Francisco, 7). La ponen con picos de Jerez y coronada con una aceituna. Es contundente y sabrosa. Sin separarse de Los Arquillos, en el Zabala (Mateo de Moraza, 9), disponen de una ensaladilla rusa que muchos catalogan como la mejor del norte. La hacen a base de patata, zanahoria y huevo cocido, y la aderezan con bonito y encurtidos, y va aliñada con una mayonesa muy ligera que la distingue y ennoblece.