Los embalses están bien surtidos, con un 13% más de agua que hace un año

Los embalses lucen rebosantes tras un verano que en lo meteorológico ha sido calificado como «normal» en Álava por la agencia vasca Euskalmet. Es decir no ha sido ni excesivamente caluroso ni húmedo, aunque en Añana y Rioja Alavesa no han andado tan sobrados de agua como en Ayala o Vitoria. En Espejo, por ejemplo, el acumulado de precipitaciones de junio, julio y agosto fue de 60 litros por metro cuadrado, diez veces menos que lo que se recogió en algunos puntos de la costa guipuzcoana. En Páganos, rozaron los 90 mientras que en Saratxo (Amurrio) o Abetxuko se alcanzaron los 115 litros.

En el caso de la estación vitoriana, esta cantidad de agua duplica a la del verano anterior y triplica la del estío de 2022. Es el mejor dato desde 2015, según el informe estacional publicado por Euskalmet. Algo tendrán que ver esos 16 días de lluvia que soportaron los vitorianos. El episodio de precipitaciones más intenso del verano alavés ocurrió el 28 de agosto. La tormentas azotaron en el este de la provincia con rachas fuertes de viento. Se recogieron 27 litros por metro cuadrado en Ilarduia y 23,6 en Moreda.

El otoño de momento ha arrancado con chubascos aislados y coletazos de la borrasca Aitor. Para hoy, las previsiones de Euskalmet para Vitoria, donde se celebra el Mercado Medieval, hablan posibilidad de lluvia durante la primera mitad del día y temperaturas en descenso, tanto que la máxima prevista apenas será de 13 grados. Mejora mañana, con la llegada de viento flojo a moderado de componente sur. El termómetro alcanzará unos agradables 19 grados con sol radiante.