«Es doloroso pero fundamental profundizar en nuestro pasado»

–¿Por qué era necesaria una publicación como esta?

–Es un paso muy importante dentro del plan del Ayuntamiento en el sentido de que se deja constancia para un futuro de cuáles son los lugares relacionados con las víctimas del franquismo en nuestra ciudad. Queda reflejado más allá de los memoriagunes o de lo que hayamos hablado en prensa.

–Su tesis doctoral trataba precisamente sobre este tema. ¿Cuál ha sido el reto ahora?

–El Ayuntamiento ya me encargó previamente un informe y ahora el reto era hacerlo a modo divulgativo, hacer esta información accesible a la sociedad. Que se conozca la historia creo que es ahora más importante que nunca, y no solo por los movimientos de memoria histórica sino por otras cuestiones como la eliminación de estatuas en Estados Unidos sin conocer a los personajes realmente. Sé que para muchas personas es doloroso, pero estudiar y profundizar en nuestro pasado es fundamental.

–El Decreto de Alcaldía relativo a las acciones a llevar a cabo en torno a la Memoria Histórica es del año 2018 y la ley nacional de 2007. ¿Se ha tardado demasiado en actuar?

–La cuestión es que llegó la crisis y no se actuó en materia de memoria histórica porque había otras prioridades. Estas cosas cuestan y lo importante es que se ha hecho. Y me parece primordial conocer nuestra historia para no repetirla. Me consta que hay gente joven que no la conoce, yo corrijo Selectividad y hay veces que se pregunta sobre el franquismo y noto en los chavales una actitud de '¿qué me estás contando?'. Ha pasado hace 40 años, tampoco es tantísimo tiempo...

–Me sorprende esto último que comenta.

–Sí, choca bastante. Por un lado, quizás esta etapa no se recoge demasiado en los libros de texto. Pero también me sorprende el desinterés. Probablemnte la mayor parte de esos chavales no vuelva a ver un libro de historia en su vida, por lo que es importante que de cara a un futuro conozcan los matices de la historia más reciente. A veces, una observa en la sociedad y en la política actitudes que recuerdan a los años 30.

–¿Qué lugares relacionados con la Guerra Civil y el franquismo se recogen en el libro?

–Los ocho lugares de Vitoria en los que se han instalado memoriagunes: la cruz de Olárizu, el cementerio de Santa Isabel donde se fusiló a 32 personas después de ser condenadas a muerte por sentencia militar, la cárcel de mujeres ubicada donde ahora está el colegio Sagrado Corazón o la antigua prisión de la calle La Paz. La publicación se completa con imágenes antiguas y también hay varios listados de represaliados que incluyen su filiación política.

–Más allá de estos lugares históricos, en Vitoria también hay actuaciones recientes que recuerdan aquella época histórica.

–Sí, y es importante. Por ejemplo la escultura colocada en la plaza de los Celedones de Oro en recuerdo al alcalde republicano Teodoro González de Zárate que fue encarcelado en la carcel provincial de Álava. O la placa en la plaza de España que recuerda el accidente de un avión alemán que acabó con la vida de tres personas: el piloto y dos vitorianos que iban a trabajar.

Placas en bloques

–¿Cree que acabarán quitándose todas las placas con el yugo y las flechas que todavía hay en varios bloques de la ciudad?

–Va a costar pero sí, por una cuestión meramente práctica. La gente de esos portales se va haciendo mayor y necesita rampa. Se están remodelando todos esos portales y eso va a llevar a que desaparezcan las placas.

–¿Queda alguna otra laguna relacionada con la memoria histórica en Vitoria?

–Todavía hay mucho que estudiar pero se están dando pasos importantes gracias al departamento de Historia Contemporánea de la Facultad de Letras de la UPV. Se están haciendo muy buenas tesis sobre la represión o el voluntariado en la Guerra Civil.