Jardinero en Vitoria por las mañanas, camello durante las tardes

Culminaba una operación iniciada a finales del año pasado, cuando a oídos de este grupo especializado llegó el runrún de la posible actividad ilegal de este hombre de dos caras. Al parecer, vendería droga al por menor en horario vespertino. Las transacciones las realizaría en bares de Lakua -barrio en el que reside-, a pie y en su propio vehículo.

En el registro de su domicilio y de su trastero, los investigadores hallaron un kilo de hachís, 205 gramos de speed, 150 gramos de marihuana, sustancia de corte para multiplicar las dosis, un par de básculas de precisión y 1.500 euros en metálico de dudosa procedencia.

Cabe recordar que, en el momento de la detención, el sospechoso portaba una placa de hachís, el equivalente a 50 gramos. Este hallazgo permitió el posterior registro de sus propiedades, con permiso del juzgado de guardia, Instrucción número 1.

La duración del operativo responde en parte a la doble vida del ahora investigado, lo que dificultó sus seguimientos. Por las tardes solía vender su mercancía ilegal por Lakua, pero también se trasladaba a otras partes de la ciudad. Incluso aprovechaba paseos a pie para colocar las dosis entre su fiel clientela. El vehículo en el que presuntamente realizaba parte de sus ventas ha sido requisado y permanece en el depósito de Aguirrelanda.

En total, el hachís aprehendido asciende a los 1.015 gramos, según informó ayer el Departamento municipal de Seguridad. «También se localizaron 205 gramos de speed, 150 gramos de marihuana y otros 30 gramos de sustancia de corte». Las dos básculas y casi 1.500 euros en efectivo completan la relación de material incautado.

Su expediente ya ha pasado a la autoridad judicial. En este caso, el Juzgado de Instrucción número 1 de Vitoria será el encargado de vertebrar este posible «delito contra la salud pública».