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Dos corzos han vuelto a caer este martes al canal del río Alegría, en Argómaniz. El primero de ellos por la mañana y en un primero momento, los vecinos se han tirado al agua para intentar sacarlo con una manta, antes de que llegaran ... los Bomberos de Vitoria. Pero el animal se ha escapado corriendo por el corredor de agua y se ha introducido en un largo tunel donde se le ha perdido la pista. Finalmente no ha podido ser rescatado.
Los vecinos temen que haya fallecido en el interior del tunel ya que presentaba heridas en las patas tras intentar salir en repetidas ocasiones del canal. También cabe la pisibilidad de que haya recorrido toda la estructura, de varios metros, hasta salir a la luz. Los bomberos, sin embargo, no han podido entrar ya que se trata de un espacio muy reducido y peligroso. Aun así, los vecinos agradecen a los operarios su implicación por intentar salvarlo. «Nos han pedido que nosotros no nos metamos al canal, pero si desde las instituciones no hacen nada lo que no podemos hacer es mirar para otro lado y dejar que un animal muera en estas condiciones», trasladan residentes en la zona.
A última hora de la tarde, la escena se ha repetido. Otra vez un corzo que cae el agua y de nuevo el despliegue de los bomberos. En esta ocasión, sin embargo, el final ha sido feliz ya que ha podido ser rescatado y liberado en la naturaleza.
Hace dos meses, se repitió un suceso similar. Un corzo fue rescatado del canal del río Alegría, en Argómaniz por los Bomberos de Vitoria, que pusieron a salvo al animal. Los funcionarios también contaron con la colaboración de los vecinos de este concejo perteneciente al municipio alavés de Elburgo. Este tipo de incidentes suelen ser frecuentes en ese corredor de agua en esta época del año. En ese sentido, los residentes han insistido en varias ocasiones en criticar que «los responsables siguen sin tomar medidas». Piden soluciones como colocar unas rampas salideras.
Además, el año pasado se halló un ejemplar adulto de la misma especie ahogado tras caer al canal, mientras otros cinco animales fueron rescatados por bomberos, policías y guardas forestales. Los animales bajan desde los bosques a beber a esta infraestructura y caen dentro sin poder salir. Ocurre también con liebres, conejos, erizos e incluso perros. Por eso, los colectivos Ekologistak Martxan y Zadorra Bizirik solicitaron el año pasado a Amvisa que adoptara medidas, como colocar rampas.
Construido en su día por el Ayuntamiento, este pasillo de más de 5 kilómetros conduce las aguas del Alegría a los embalses del Zadorra. Tras décadas sin apenas incidentes con animales (los bomberos contabilizan entre 1 y 3 anuales los últimos cursos) los sucesos de este tipo se incrementaron en los meses del confinamiento. En un informe del año pasado, Amvisa recordó que el canal lleva las aguas del Alegría, que tiene una gran variación estacional, lo que dificulta adoptar medidas de protección como plataformas y otras. A raíz del problema, la sociedad municipal, la Diputación y URA crearon un grupo de trabajo para abordar el problema y solicitar la supresión del canal ante la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE).
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