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La marca 'Viñedos de Álava' amenaza con dejar un postgusto amargo en boca. Al menos en las de PNV y PSE, socios de gobierno en la mayoría de instituciones vascas. Los mandos jeltzales garantizaron ayer que, a pesar de sus llamadas a convivir con ... la marca Rioja, no pondrán ningún palo en la rueda de 'Viñedos de Álava', la nueva denominación impulsada por parte de las bodegas de ABRA. Los socialistas, en cambio, expresaron su rechazo frontal a la vía rupturista. «Es una locura», sostiene Cristina González, teniente de diputado general del PSE, evidenciando la enorme distancia que en esta materia le separa de su compañero de gabinete Eduardo Aguinaco, quien aboga por despejar el camino burocrático.
González asegura que ella no entra a valorar las decisiones administrativas que asumen sus socios, pero sus palabras enmiendan la plana a los peneuvistas y su posición choca frontalmente con el presidente del Araba buru batzar (ABB), José Antonio Suso. La líder socialista califica de «error» perder la referencia de una marca de prestigio como Rioja -la denominación más antigua de España- que, además, requerirá una enorme inversión para armar a la nueva denominación de los órganos para vigilar la producción y la creación de laboratorios. «Los gastos de producción y promoción se dispararían», avisa la líder del PSE, que también gobierna con el PNV en el Gobierno vasco, una institución que ha avalado sin ápice de duda la ruptura.
Suso prefiere mantener una postura ambigua respecto a 'Viñedos de Álava' y justifica a sus impulsores. «Si se quiere poner en marcha es porque la DOC (Denominación de origen calificada) no cumple con sus expectativas. Buscan nuevos modelos de producción para que sus negocios sean más rentables», afirma el burukide y actual alcalde del municipio riojanoalavés de Leza.
Las discrepancias en materia vitivinícola se repiten entre socios. Hace apenas una semana que el Ministerio de Agricultura, que dirige el socialista Luis Planas, rechazó la reclamación del PNV para contar con voz y voto dentro del Consejo Regulador Rioja -ahora carecen de poder de sufragio- sobre aspectos básicos como la recogida de uva, la producción o la distribución. Un intento fallido en la particular batalla emprendida por los nacionalistas por ganar peso e influencia en el pujante sector del vino y en la comarca.
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