Cómo quitar la nieve acumulada en el coche y en la puerta de casa

Pablo Lodeiro, experto en herramientas, comparte con EL CORREO algunas consejos para sobrellevar lo mejor posible la notable presencia de nieve en las calles. Así, explica que lo «primero» para evitar resbalones es echar sal en el pavimento para adelantarse a posibles congelaciones. «El agua se congela a cero grados y con la sal es a otra temperatura diferente; por lo que sirve para evitar que se endurezca la nieve», apunta. Además de evitar los temidos resbalones...

Aunque resulta una obviedad, una de las premisas para enfrentarse al temporal es retirar «cuanto antes» la nieve. Es decir, si por la noche nos despertamos y ha nevado, habría que hacerlo esa misma mañana. Esa «previsión», apunta este trabajador de Bellota Herramienta, sirve para evitar estampas como las que se sucedieron con la famosa borrasca 'Filomena'. A las precipitaciones se le sumaron varios días de mucho frío, se endureció la nieve y fue mucho más difícil retirarla.

Otra de las dudas habituales que surgen en jornadas como la de este miércoles es cuál es la pala más recomendable para retirar la nieve acumulada. Vemos todo tipo de herramientas en las calles, pero Lodeiro desliza que las más recomendables son las de aluminio o de plástico. «Las primeras son más resistentes al frío y cuanto más ligera sea mejor porque la densidad de la nieve no es mucha», explica. Aunque vemos habitualmente a gente con palas típicas de la obra, éstas no son las más idóneas. «Se puede trabajar, pero no es la óptima. Una de hierro puede pesar dos kilos, mientras que una de aluminio no supera los 970 gramos». Para evitar lesiones se recomienda agarrar la pala con una mano lo más cerca a ella y la otra en la anilla; flexionar las piernas para no cargar la espalda y mantenerse siempre cerca de la pala.

En el caso de los vehículos, que duermen en muchos casos en la calle en las noches de temporal, se enumeran algunos consejos de prevención y también actuación en caso de heladas. «Si se puede aparcar debajo de un árbol o cerca de un edificio, estas son zonas más protegidas con menos probabilidades de que se forme hielo», indica Lodeiro.

El remedio más casero de poner un cartón en el parabrisas sirve para evitar que se forme hielo. Por último, si se llega a formar ese temido hielo en el parabrisas, conviene «rociar» la zona con alcohol y pasar una rasqueta. «Evitar el agua caliente» es uno de esos consejos que parecen evidentes para no dañar los cristales.