Los coches ya circulan a 30 por Iturritxu

El Ayuntamiento buscaba dar fluidez a ese punto clave en el tráfico del sur de la capital, con una circulación intensa en el eje Este-Oeste, desde Salburua a Zabalgana, sobre todo en horas punta. Las críticas de los residentes fueron en aumento, preocupados por el peligro para el elevado tránsito peatonal en Iturritxu. Niños, padres, paseantes, ciclistas... y ese malestar se elevó a mediados del mes pasado, cuando un adolescente de 12 años fue atropellado y sufrió heridas leves. El sentir del barrio de Adurza ha estado respaldado por otros agentes sociales, como los centros educativos y clubes deportivos de los alrededores. La zona alberga dos colegios, el San Ignacio y la ikastola Adurtza. También varias instalaciones deportivas y un paseo que discurre desde Zumabide a Olárizu.

En un primer momento, el Ayuntamiento trató de dar respuesta a las inquietudes vecinales el pasado 10 de noviembre con la instalación de dos radares, procedentes del Bulevar de Salburua, para controlar la velocidad hasta los 50 kilómetros hora. Una medida que dejó una sensación agridulce al vecindario, donde continuaron reivindicando la conversión de la vía en zona 30 a pesar de que el Ayuntamiento asegura que las cabinas «han reducido la velocidad de forma significativa». Finalmente, el Consistorio ha cedido a la petición vecinal para colmar de una forma más contundente el tráfico de la arteria.

El nuevo límite de velocidad fue calificada como «una gran noticia para el barrio», según palabras del portavoz vecinal José Ángel Lekuona. «El riesgo para el peatón será mucho menor. La seguridad aumentará y se podrá pasear con mayor tranquilidad», recalcó. En cambio, la plataforma Iturritxun3z llamó en un comunicado a «valorar la medida con cautela» e incidió en la necesidad de «suprimir el tercer carril habilitado», entre otras propuestas, a través de un documento que ha hecho llegar al Ayuntamiento. «Iturritxu es más peligrosa desde que cuenta con tres carriles. Se va a seguir produciendo un efecto llamada y la cantidad de coches en circulación seguirá en aumento. Es un buen comienzo, pero queda mucho por hacer», defiende la plataforma. Colectivos como el Colegio de Arquitectos y la plataforma Benetako Green también alzaron la voz contra la reforma de la arteria. Los ecologistas denuncian que el ensanchamiento de esta vía y la reforma de la rotonda de Esmaltaciones buscan «amortiguar» los efectos sobre el tráfico en el Sur como a consecuencia del BEI.