El proyecto del tranvía a Zabalgana deberá afinarse al máximo para reducir el impacto de las nuevas cocheras en el entorno del humedal de Salburua. Será el principal punto crítico que encontrará la próxima extensión del metro ligero, que obliga a crear una nueva infraestructura ... para 'aparcar' los convoyes. Así se extrae de la respuesta que ofrece la consejera de Movilidad Sostenible, la socialista Susana García Chueca, a una pregunta presentada por el PP en el Parlamento vasco. «La implantación de las cocheras en Betoño en una zona cercana al humedal de Salburua requiere de estudios y medidas compensatorias mucho más específicas que una ampliación urbana del tranvía», señala.
Publicidad
La obligación de proteger la zona, reconocida por su valor ambiental, implica que el Gobierno vasco no se aventure a dar plazos «de manera fiable» para lograr la declaración de impacto ambiental y, con ella, el despliegue definitivo de la nueva extensión. «Esta ampliación no es en modo alguno comparable con la de Salburua (la última en inaugurarse)», explica la consejera. En el caso de este último ramal, el trámite necesitó nueve meses.
Pese a todo, el Gobierno vasco confía en mantener los últimos plazos anunciados de cara a comenzar la obra. Es decir, abrir la fase de alegaciones en noviembre (con un mes de duración) y aprobar el estudio informativo de forma definitiva en el «primer trimestre» del próximo año, con el objetivo de arrancar los trabajos en la recta final de 2025. Este calendario implica completar en apenas seis meses los mismos pasos que necesitaron año y medio en la implantación del tranvía a Salburua.
Los ambiciosos plazos han provocado cierto escepticismo en el PP, que los considera «irreales» y cree que habrá «retrasos». Sin embargo, los populares consideran que esa demora se verá acentuada también por las cocheras. «La imposición del PNV y el PSOE de construir las cocheras del tranvía en Betoño va a retrasar nuevamente los plazos de la llegada del tranvía a Zabalgana», afirma la parlamentaria Ainhoa Domaica, quien recuerda que la opción de Betoño «no fue la mejor valorada por situarse dentro de la zona periférica de protección del espacio protegido de Salburua».
Publicidad
En este sentido, el PP concluye que «esta decisión contra el criterio de los técnicos del proyecto inicial hace más compleja la tramitación del tranvía». La alternativa de habilitar las cocheras en Betoño se impuso a la opción de construir una infraestructura en la zona sur de Vitoria por su impacto en el tráfico de la zona de Iturritxu. Esta ampliación de la red de Salburua hacia Betoño también permitía acercarse al Buesa Arena.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
A la venta los vuelos de Santander a Ibiza, que aumentan este verano
El Diario Montañés
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.