Una jugadora lesionada y una denuncia por robo, el balance final de un partido de Liga Vasca en Vitoria

No fue un incidente más del juego, sino «a causa del mal estado del terreno de juego», según denunció el conjunto santurtziarra a través de sus redes sociales y en conversación con ELCORREO. Las planchas de césped artificial que alfombran el campo presentan importantes deficiencias. «Algunas se levantan, están muy desgastadas y se ve el cemento de debajo, las bocas de riego también están al descubierto. Las jugadoras evitan tirarse al juego», confirman portavoces de ambos equipos. Para las vizcaínas «ha sido una sorpresa que no esperábamos en un campo donde se juega Liga Vasca». Para la formación local es el pan nuestro de cada día desde hace años.

«Hemos avisado al Ayuntamiento varias veces,pero no hay respuesta. Nosotras ya nos hemos acostumbrado a jugar en estas condiciones como el resto de equipos que entrenan y juegan aquí, pero es muy peligroso y algún jugador ya se ha lesionado», apuntan desde el Hauskaitz. A principios del pasado mes de septiembre el Consistorio lanzó un concurso público para redactar los proyectos de renovación de varios campos de la capital alavesa. En la lista se incluíae la sustitución del césped artificial del terreno de juego principal y del de fútbol 5 de San Martín. El plan supondrá actuar de forma progresiva en los distintos recintos a lo largo de los próximos dos años. De todas formas, «si se ha disputado el partido es porque el árbitro ha visto que se podía», argumentaron desde el Consistorio donde «se investigará lo ocurrido».

Y es que, la lesión de Aitana no es el único mal recuerdo de la familia del Peña Athletic Santurtzi se lleva de su paso por Vitoria. «Alguien ha entrado en el vestuario y nos han robado algo de dinero», desvela Aranzazu Andrés una de sus responsables. «He entrado justo cuando se ha hecho daño mi jugadora y me he encontrado allí a una persona revolviendo, al verse sorprendida ha dicho que buscaba los baños y se ha ido. Al finalizar el encuentro, hemos visto que nos faltaba dinero y hemos denunciado. Ha venido incluso una patrulla de la Ertzaintza», relata Andrés. Tampoco es un suceso nuevo para el equipo local. «Sí, nos han contado y no nos sorprende porque es habitual. Es una zona de paso y está abierta por lo que es muy difícil de controlar y tampoco se hace», asumen con disgusto desde el Hauskaitz.