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Cuenta el reparto de 'Maixabel' que trabajar con la directora Icíar Bollain es especial. No hay golpe de claqueta ni se oye el grito de acción en el momento en el que se enciende el piloto rojo. En su lugar, la cineasta les sugiere a ... los intérpretes que empiecen a actuar cuando se sientan preparados. Algo similar a esa peculiar forma de grabar, sin hacer demasiado ruido, ha ocurrido con Álava como escenario de películas. El territorio histórico ha ido ganando peso en el último lustro en el paisaje del cine español. Este año, tres largometrajes han elegido como escenario diferentes puntos de la geografía alavesa. 'Maixabel', el último gran fenómeno en salas, rodó a principios de año diferentes secuencias en la antigua cárcel de Nanclares de Oca y el pantano de Legutio; 'El cuarto pasajero', de Álex de la Iglesia, eligió la Bodega Marqués del Riscal como una parada de la road-movie que inició su viaje en Bilbao y llegará a las salas de cine en los próximos meses;e 'Irati', el esperado segundo largometraje del vitoriano Paul Urkijo, se rodó hace un mes en las Cuevas de la Leze. La ambiciosa película de Urkijo está llamada a ser el 'Excalibur' vasco y cuenta con un presupuesto de más de cuatro millones de euros, uno de los más altos del cine de Euskadi.
Además, recientemente se ha estrenado en cines 'Retrato de mujer blanca con pelo cano y arrugas', película dirigida por el madrileño Iván Ruiz Flores en la que se ven diferentes tomas exteriores de la Catedral de Santa María. Tras un año pasado atípico en el que toda la producción se resintió debido a la pandemia, se recupera el ritmo de anteriores ejercicios como 2019, cuando se rodaron 'Baby', aplaudido regreso de Juanma Bajo Ulloa;y 'Ane', de Pérez Sañudo, ganadora de cinco estatuillas en los Goya. En apenas un lustro, los escenarios locales se han acentuado en la gran pantalla con 'Handia', 'Errementari', 'Vitoria. 3 de marzo', 'La pequeña Suiza' o 'El silencio de la ciudad blanca'. El punto de inflexión fue 2015 cuando se rodaron hasta cuatro títulos ('Plan de fuga', 'Rey gitano', 'Cuerpo de élite', 'Órbita 9').
Desde la Film Office, servicio municipal destinado a facilitar los rodajes, reconocen que la provincia se ha posicionado como «destino potencial» de rodajes por la «facilidad administrativa» como clave, sumada a la «variedad de las localizaciones», señala su responsable Ana Ruiz. No hay un escenario predilecto. El abanico de posibilidades va desde zonas más áridas a bodegas o el casco medieval de la capital alavesa. A lo largo de este año, la Film Office ha prestado ayuda a 34 producciones (diez programas de televisión, siete cortos, tres documentales y dos videoclips).
A este impulso del sector también han contribuido las ayudas al audiovisual del Ayuntamiento de Vitoria y de la Diputación de Álava. David Blanka reconoce que estos apoyos han hecho aflorar el «talento emergente». El actor y profesor de interpretación en la Escuela de Cine del País Vasco formó parte del reparto de 'Maixabel', donde encarna a un funcionario de prisiones. ¿Se esperaban el éxito en taquilla? «El tono realista y que tratara un tema tan cercano algo hacía presagiar», comenta el intérprete asturiano afincado en Vitoria desde hace años que compartió reparto con otros alaveses como María Cerezuela, Mikel Bustamante y Mirena Nafarrate.
«Es un territorio muy propicio para rodar y las ayudas contribuyen a que el tejido cultural pueda desarrollar sus proyectos», cuenta el director llodiano Kepa Sojo, quien trabaja en dos proyectos en fases incipientes. Uno de ellos es la serie 'Los amigos de Mínguez', que ha contado con el apoyo de Project Lab, programa de asesoramiento impulsado por Apika (Asocación de Productores Audiovisuales Independientes de Álava), entre cuyos seleccionados se encuentran otros cuatro proyectos de largometrajes que podrían tomar la ciudad en los próximos años:'Koaxi' (Maluta), 'La anfitriona' (Platanobolígrafo); 'Todos los colores a la vez' (CSC Films) y 'Alumbramiento', de Imanol Ortiz. «Hay que ver el recorrido porque se encuentran en un estado inicial y surgirán cambios hasta que, ojalá, lleguen a rodarse», señala la laureada directora de animación Maite Ruiz de Austri, quien también ejerce como presidenta de Apika y está convencida de que 'Irati' va a ser un «peliculón».
Con la vista puesta en el próximo año, Estíbaliz Urresola se encuentra inmersa en su ópera prima, '20.000 especies de abejas', con el diseño del calendario de rodaje, búsqueda de localizaciones y «cerrando los distintos papeles», comenta la directora llodiana que se encuentra en la lista de preseleccionados que opta al Goya a mejor corto por 'Polvo somos'. Aunque no hay plazos cerrados, el rodaje de 'Los últimos románticos', la adaptación de la novela de Txani Rodríguez que llevará a cabo Pérez Sañudo y la guionista Marina Parés, se prevé que arranque a comienzos de 2022. También la joven Beatriz de Silva se encuentra ultimando el guion de su primer largometraje, 'Todos los colores a la vez', a lo que le seguirá la búsqueda de financiación. Si algo tiene claro la realizadora es la localización. «Estoy segura de que Álava va a estar en los planes de rodaje».
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