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Les ves correr disfrazados, con el carricoche del niño, con pancartas, en grupitos y parece que la San Silvestre es una reunión de amigos. Y no. Hay que correr seis kilómetros y medio, una distancia lo suficientemente elevada como para tomarse esto en serio - ... al menos, un poco- y no empezar el Año Nuevo con el pie vendado o con tos perruna. Los doctores Íñigo Simón y Guillermo Cuesta, especialistas en medicina deportiva de Vithas San José, explican en este artículo cuáles son las precauciones básicas que hay que tomar para tener una carrera feliz.
«El recorrido no es una tontería, se trata de correr un tiempo prolongado, conviene haber entrenado algo antes», señala Simón. El cuerpo va a acusar ese desgaste así que no está mal que 24 horas antes se ingieran hidratos de carbono, vamos que se cene pasta o arroz o se coman patatas. Hay que evitar las comidas que provocan gases como las legumbres, las alcachofas o la lechuga, para tener un tránsito intestinal acomodado al trote. Y también hay que desechar las bebidas con gas.
Llega la hora de elegir atuendo. La tarde será fría, lo normal en el diciembre vitoriano, pero no conviene salir a correr con una prenda demasiado abrigada. Los especialistas recomiendan la estrategia de la cebolla: o sea capas. Una manga corta, otra larga y otra corta, por ejemplo. «El aire entra entre capa y capa y abriga». Atención, korrikalaris, ni les ocurra estrenar calzado ni ir demasiado prietos. Y es conveniente completar el modelo 'runner' que hayan elegido para esta San Silvestre con un buff y un gorro. «Impiden que salga calor del cuerpo».
Temperatura. El frío es enemigo de los músculos. Conviene llevar varias capas de ropa fina y cómoda.
Y luego está lo de las bocanadas. Correr y coger el aire por la nariz y soltarlo por la boca es complicado. Es normal que en un momento de máximo esfuerzo se intenten llenar los pulmones lo más rápido posible, por la boca. Pero ese aire frío puede originar tos, irritación bronquial y catarro.
Un buen consejo para aclimatar los pulmones y también los músculos y articulaciones es realizar un calentamiento de al menos 10 minutos antes de la prueba. No sólo estiramientos. Conviene correr suavemente. «Hay que hacer que la sangre llegue a la musculatura», indica Simón. Otra clave es la de hidratarse. Recomienda echar un par de tragos largos de agua cada 20 minutos. «Con esa distancia lo de llevar barritas energéticas y frutos secos no creo que sea necesario».
Y ojo, cuando lleguen a meta, no se queden ahí parados. Otros cinco minutos de estiramientos, de correr muy suave o de andar a marcha reducirán el riesgo de lesiones. Y para terminar, lo de siempre: no empiecen a correr como si fuesen a perder algún tren, ahorren energías para el final y si notan molestias, dolor en el pecho, falta de aire, sensación de mareo déjenlo inmediatamente.
La 37ª edición de la San Silvestre, la popular prueba en la que participan miles de vitorianos (este año había 4.400 dorsales disponibles) incluye un ligero cambio en su recorrido para esquivar las obras del colector de la zona de La Florida. El itinerario, que conserva la distancia de 6.450 metros, comenzará en la calle Corazonistas a las 18.30 horas y tendrá su meta en Olaguíbel -una hora antes se celebrará una carrera txiki de un kilómetro de recorrido con salida y meta en esta misma calle-. Parte de la recaudación irá destinada a Asajer, asociación de jugadores en rehabilitación. El Ayuntamiento ha pedido que los participantes lleven alguna prenda de color verde como guiño a la capitalidad 'green' de Vitoria-Gasteiz.
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