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Llega un frente de alta presiones desde el Atlántico que hará girar el tiempo en Álava a partir del jueves por la tarde. Una nueva borrasca hará que el territorio vuelva a tiritar unos días a causa de un desplome de las temperaturas máximas, que ... no pasarán de los 7-9 grados en el arranque del fin de semana. Además, hay que sacar los paraguas, ya que llegan jornadas de inestabilidad y precipitaciones, algunas de ellas en forma de nieve en cotas relativamente bajas. Este jueves, además, ha amanecido con fuertes rachas de viento que ya han superado los 100 kilómetros por hora.
En Vitoria, ha soplado con fuerza: 94,2 km/h; lo que ha provocado el desplazamiento de medio centenar de contenedores y vallas. En zonas más expuestas, como Herrera y Zaldiaran, han alcanzado los 104 y 112 kilómetros por hora, respectivamente, sobre la once de la mañana. El Departamento vasco de Seguridad ha registrado 34 incidencias en Álava por caída de ramas, árboles o parte del mobiliario.
Euskalmet activó ayer también el aviso amarillo por viento y nieve para toda la jornada del viernes en Álava, jornada en que está prevista que la cota baje hasta los 800 metros. Pero es que los copos se podrían ver en altitudes de 700 metros la madrugada del sábado aunque de manera intermitente. «Es difícil que llegue a cuajar», explica la meteoróloga de Euskalmet Onintze Salazar quien señala que «viene una situación de tiempo invernal que no es excepcional».
Cuesta pensar en frío y agua después de días de terraceo al sol y temperaturas de 16 o 17 grados, pero es que eso no era lo habitual para esta estación y menos en Vitoria. Según agrega Salazar, aunque el jueves por la mañana aún disfrutaremos de viento de suroreste y temperaturas agradables, por la tarde llega ya el frente que trae chubascos y en el caso de Álava precipitaciones en forma de nieve a una cota que bajará hasta los 1.000 metros. Es posible, por tanto, que las cimas de los montes más altos luzcan manto blanco.
El viernes y el sábado toda esa inestabilidad, dice la meteoróloga de la agencia vasca , irá asociada a aire frío y chubascos intermitentes. Las máximas serán de 7-8-9 grados y la cota de nieve bajará durante el viernes hasta los 800 metros y ya entre la noche y la madrugada del sábado llegará incluso hasta los 600 metros, según las previsiones que manejan hoy los expertos de Euskalmet. Las mínimas bajarán hasta un grado, por lo que es posible que también haya heladas.
El sábado la nieve se aleja (sube la cota a 2.000 metros) y se mantendrán los chubascos aislados. El mercurio de los termómetros subirá un poco el domingo. Más allá de ese día, los pronósticos del tiempo son sólo aproximativos, aunque algunas agencias meteorológicas hablan de la llegada de otra borrasca con más frío. En las estaciones de esquí del Pirineo se preparan para las mayores nevadas de lo que va de invierno y además en plena semana blanca de los escolares madrileños.
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