Frío intenso y precipitaciones intermitentes en forma de nieve para las próximas horas. La borrasca 'Juliette', una masa de aire helado de origen ártico, seguirá presente en Euskadi durante este martes y el miércoles, cuando empezará a remitir según avance la jornada. El jueves se ... espera que suban ligeramente las temperaturas y que si precipita sea ya en forma de lluvia. Los alaveses volverán a ver nevar después de que un manto blanco cubriera este lunes Vitoria y buena parte de la provincia y complicara la circulación en la red viaria alavesa. Los puertos de Opakua y Herrera permanecieron ayer cerrados varias horas y las cadenas fueron obligatorias para circular por otros cuatro puertos. Eso sí, no se registraron accidentes reseñables ni retenciones a causa del temporal a diferencia de lo que ocurrió con la nevada de enero, cuando los conductores sufrieron atascos de hasta 15 kilómetros en la autovía de Altube. Hoy, martes, Herrera ha sido el único puerto de montaña que ha estado cerrado -ha reabierto al filo de las diez de la mañana-, aunque la alerta por la presencia de hielo y/o nieve es generalizada en toda la red viaria alavesa.
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El Gobierno vasco mantiene activo el aviso amarillo por nieve para el martes y el miércoles hasta las 9.00 horas, y la cota de nieve se situará en torno a los 100-300 metros. Sin embargo, no se prevé que se acumulen grandes espesores, ya que las precipitaciones serán débiles y ocasionales. El ambiente se mantendrá gélido con temperaturas mínimas de -2 grados en Vitoria mientras que las máximas podrían subir muy ligeramente, llegando a alcanzar los tres grados en la capital alavesa.
Ante estas previsiones, el Gobierno vasco ha comunicado que el Plan de Vialidad Invernal pasa a su fase operativa. Esto significa que se podrían activar hasta un total de 205 máquinas quitanieves de las tres diputaciones forales y autopistas; siete grúas pesadas situadas en puntos estratégicos para la retirada de vehículos de gran tonelaje y otros 130 vehículos que servirán de apoyo para las tareas de coordinación y vigilancia. A esto se sumarán las patrullas de las unidades territoriales de tráfico de la Ertzaintza. La Diputación alavesa, por su parte, mantiene en fase de emergencia su operativo de vialidad invernal. Para garantizar el buen estado de las carreteras hay movilizados 51 operarios, 17 máquinas quitanieves y dos patrullas de Miñones.
El miércoles, el mercurio descenderá algo más, y es que según la previsión de la Agencia Vasca de Meteorología Euskalmet en la capital alavesa se alcanzarán los tres grados bajo cero. Aemet rebaja todavía más esa cifra: hasta los -5 grados. Las máximas no superarán los 4 grados. El viento del norte seguirá muy presente y de madrugada se esperan heladas «prácticamente generalizadas». El resto de la semana no habrá grandes cambios, la bufanda y los guantes seguirán siendo buenos aliados ya que aunque los copos no hagan acto de presencia, las mínimas no superarán los 0 grados. Durante la madrugada de este martes, Herrera ha vuelto a marcar la mínima en la provincia, con 5,4 grados bajo cero. Le siguen Kapildui (-5,1) e Iturrieta (-4,7). En Vitoria, se han anotado 1,1 grados bajo cero en la estación meteorológica de Abetxuko.
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De madrugada
La presencia de Juliette, una borrrasca que estaba anunciada y que mantiene a una treintena de provincias españolas en alerta, comenzó a notarse durante la madrugada de este lunes. En Vitoria los primeros copos aparecieron, de forma muy tímida, al filo de las seis de la mañana. La ciudad amanecía con un fino manto blanco y desde ese momento se sucedieron precipitaciones débiles de forma intermitente. La nevada comenzó a arreciar a partir de las 10.00 horas y a mediodía el sol fue ganando protagonismo. Por la tarde, eso sí, regresaron los copos con una intensidad variable. Una situación que se repitió en pueblos de la Montaña Alavesa, la Llanada o Gorbeialdea.
La masa de aire polar que está congelando Euskadi y el resto del país tuvo su reflejo también en los termómetros. Apenas dos de las 32 estaciones meteorológicas que Euskalmet tiene repartidas por Álava marcaron ayer temperaturas mínimas por encima de los cero grados. La mínima se la anotó Herrera, con -7,8 grados. Le siguieron Kapildui e Iturrieta, donde se registraron 6,1 y 4,9 grados bajo cero. En Vitoria, el dispositivo que la Agencia Vasca de Meteorología tiene instalado en el barrio de Abetxuko contabilizó 1,7 grados bajo cero.
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Con este panorama, las instituciones recomendaban mucha precaución al volante. En Bizkaia tampoco se libraron de las gélidas temperaturas ni de la nieve, que cayó incluso en San Sebastián tiñiendo de blanco la playa de La Concha.
Los agricultores alaveses consultan estos días felices la previsión meteorológica. Aunque la nieve y el intenso frío puedan suponer un inconveniente para la mayoría de la población, son factores que en esta época favorecen al campo. «La nieve y el frío vienen ahora muy bien porque matan los hongos que en primavera atacan los cultivos y además ayudan a limpiar el ambiente», explica Javier Torre, presidente de la UAGA. Los copos y las heladas no han afectado al trigo, la cebada, los guisantes o la avena que se cultivan ahora.«Estamos deseando que llueva para que se llenen los acuíferos de cara a la primavera. Hay algunas balsas que están prácticamente vacías», señala Torre, que añade que el problema sería si las heladas continúan a partir de abril. «Entonces sí sería un problema».
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