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Convencer a la familia de Alberto Schommer de que la Sala Amárica es el lugar idóneo para rendir homenaje al fotógrafo. Ese sigue siendo el propósito del Ayuntamiento de Vitoria respecto a la creación de un centro de exposiciones con el nombre del creador ... en la actual sala de muestras ubicado en el centro de la ciudad.
Esta iniciativa del Consistorio, surgida en colaboración con la institución responsable de la sala, la Diputación de Álava -ambos departamentos de Cultura gobernados por el PSE- permanece inamovible, a pesar de la negativa de la familia hace tan solo un mes. «Tiene que ser mucho más que una sala a pie de calle», dijo Nicolás Casla, sobrino del fotógrafo, en una ofrenda floral con motivo del quinto aniversario de su fallecimiento.
Al mismo tiempo, la familia sugirió retomar el proyecto del Palacio Zulueta, suspendido años atrás. Casla incluso entregó una serie de planos a la concejala de Cultura, Estíbaliz Canto, como presentación de su planteamiento ideal en el edificio de la Senda. Una vez estudiado ese proyecto, el Consistorio lo ha desestimado al considerar que requeriría una elevada inversión. Incluso contemplaba dos edificios anexos al Palacio Zulueta. «Es inasumible con la situación actual», insisten desde el Ayuntamiento, que ofrecerá más detalles del proyecto en la Sala Amárica a la familia en breve. El acuerdo con los herederos sería fundamental para la cesión de fondos. Pese a que las declaraciones éstos evidencian que las conversaciones se encuentran distanciadas, desde las instituciones no tiran la toalla para acoger allí un centro dedicado al fotógrafo. «Tiene salas suficientes para hacer un proyecto importante para la fotografía», defiende la diputada de Cultura, Ana del Val.
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