Las escaleras de acceso al parque de Lamuza desde la zona peatonal de la calle Iturriaga, ya en el barrio de Ugarte, se han convertido en una trampa en las últimas semanas. Este lunes, hacia las ocho de la mañana, un coche se ha quedado atascado en los escalones. Es el segundo que pasa por el mismo trance en los últimos días tras un suceso similar ocurrido el 28 de noviembre pasado. Al parecer, el GPS deriva a los vehículos hacia esa zona y la falta de visibilidad les acaba llevando hasta las escaleras donde quedan atrapados.
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Algunos vecinos ya han reclamado «que pongan un bolardo o un tiesto para que vean que no se puede pasar. Se tienen que subir a la acera, pero aún así, igual no se ven las escaleras desde el coche», han señalado.
De hecho, algunos residentes han apuntado que, en realidad, han sido ya tres los vehículos atrapados en esta zona. El primero, hace menos de un año, fue una furgoneta que, al ser más alta, logró bajar los escalones y no precisó de la ayuda de la grúa como los coches accidentados en los últimos días.
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