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La presidenta de la federación de asociaciones de personas con enfermedad mental, la llodiana María Ángeles Arbaizagoitia, recibió ayer el premio Sareen Saria que entregan las redes y entidades integradas en el tercer sector social vasco, las que buscan relaciones articuladas alrededor del principio de solidaridad y no tienen ánimo de lucro. El premio se entregó por la larga trayectoria de Arbaizagoitia como voluntaria en el ámbito de la salud mental, que acumula ya 36 años de trabajo. En Llodio es conocida por su papel como presidenta de Asasam, pero también preside la federación vasca, que agrupa a asociaciones de Guipuzcoa, Álava y Vizcaya.
Arbaizagoitia recogió el premio de manos del lehendakari, Iñigo Urkullu, y se mostró muy emocionada por el homenaje. Aprovechó la oportunidad para reclamar «mayor inversión en recursos para las personas con problemas de salud mental, que sean respetuosos con sus derechos y que impulsen su vida autónoma», en línea con su papel reivindicativo y luchador. Recordó el suicidio de su hijo Txomin. «Fue tal la injusticia que sentí al comprobar cómo se arrinconaba a las personas por tener un problema de salud mental. Se las empujaba a la soledad y sin esperanza de un proyecto de vida digno. Por ello, y conociendo la falta de recursos de apoyo, me decidí exigir una atención adecuada».
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