Llodio localiza amianto en las gradas del polideportivo La Granja

Este espacio se sigue usando con normalidad y el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales, Osalan no ha exigido la adopción de medidas adicionales. «Conocen la situación y no piensan que sea un riesgo. No hemos recibido instrucciones para actuar de otra manera», señala la alcaldesa, Ainize Gastaka.

En este caso, la decisión que ha adoptado el Ayuntamiento es «encapsular el amianto con un recubrimiento de madera», explicó. Se trata de una solución temporal mientras se encarga su retirada. Es una intervención de envergadura, que exigirá la selección de una empresa mediante un concurso público.

El amianto de las gradas se suma al que se detectó a finales de abril en los vestuarios de las piscinas. La construcción del polideportivo data de 1986 y, como en otros edificios, se utilizó el asbesto en la obra. Su peligrosidad se deriva de la liberación de sus fibras por envejecimiento o al romperse. Estas pueden quedar flotando en el aire y entrar en el sistema respiratorio de quien esté en la zona cercana.

En el caso del polideportivo de Llodio, las fibras de amianto se han localizado en los soportes de unos bancos que parecen hechos de cemento. Gastaka explicó que «lo localizó un operario que trabajaba en el vestuario. Se dio cuenta que una de las patas del banco del vestuarios masculino estaba cortada y asomaban las fibras de amianto». Se cerró inmediatamente, pero al día siguiente se inspeccionó el vestuario femenino y se repitió el hallazgo. Los vestuarios quedaron clausurados a partir del 26 de abril. La inspección posterior del edificio ha dado como resultado que el amianto también se utilizó en la construcción de los bancos de la grada superior, del mismo tipo que los de los vestuarios.

«Llamamos a Osalan para ver qué había que hacer», afirma gastaka. El Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales señaló cuáles eran los protocolos en cada caso. En los vestuarios, una vez clausurados, «llamamos a tres empresas para pedir presupuesto para su desmantelamiento». La operación exigirá el cierre de todo el polideportivo durante «dos o tres días», agregó. De momento, no hay fecha para esta obra, que se abordará «cuanto antes», añade. Osalan por su parte, tras la inspección del edificio, aseguró que «hay una serie de empresas autorizadas para retirar el amianto que tienen que seguir un procedimiento. Lo presentan en la Inspección de Trabajo y si se les da el visto bueno, pueden quitarlo».

La preocupación se ha extendido entre los usuarios, inquietos por la afección que puede suponer haber estado en contacto con las fibras, que pueden producir cáncer con el tiempo. «He cambiando a mi hija durante años en ese vestuario para que vaya a la piscina. Estoy preocupada», explicó hace unos días una usuaria del vestuario donde se localizó el amianto, que lamentó «la falta de información».