El Juzgado exime de culpabilidad a Guardian en el concurso de acreedores de Glavista

Con la fábrica parada, la plantilla, a través del sindicato ELA y del administrador concursal, reclamaron la culpabilidad del concurso de acreedores en el Juzgado para exigir a Guardian responsabilidades sobre los 240 trabajadores Glavista. Pero la sentencia, emitida el martes, solo inhabilita a la empresa administradora del fabricante de lunas, Terrahe & Associates Beteilingungs, que había designado a Cristoph Bernhard Paul Terrahe como administrador de la fábrica llodiana.

Con el fallo se «inhabilita a Cristoph Bernhard Paul Terrahe para administrar bienes ajenos así como para representar a cualquier persona durante seis años». A través de esta sentencia, el Juzgado declara formalmente la culpabilidad del concurso, como pretendían el sindicato ELA y el propio administrador concursal, pero en la práctica eso no va a implicar ninguna ventaja para los 240 trabajadores de la fábrica.

Es más, la sentencia cuestiona el papel de los demandantes por «ausencia de prueba concluyente que permita desplegar la sanción de un juicio de culpabilidad». Respecto a la argumentación de ELA, señala que «lanza toda una ráfaga de presunciones pero sin más argumento que la venta fraudulenta de la unidad de negocio en 2020, el desvío de activos hacia la distribuidora de Alemania, sin base probatoria alguna».

ELA y el administrador concursal presentaron la petición de culpabilidad del concurso de acreedores en febrero de este año, un año y un mes después de la presentación del preconcurso. La declaración de culpabilidad la debería haber tramitado el administrador concursal, Antonio Martínez Manso, cuando comenzó el proceso, pero no lo hizo.

ELA impulsó la reclamación en el Juzgado pese a que la deuda de Glavista con la plantilla era de 614.000 euros y no llegaba al millón exigido por la normativa para que los acreedores puedan participar en este trámite. Una vez desvelada la estrategia de ELA, el administrador concursal se adhirió a la demanda en nombre de la empresa Valenciana de Suministros y Contratas Industriales, participada por Glavista y también en concurso de acreedores, a la que debía seis millones de euros.