El Gobierno vasco asegura que el apagado del horno de Guardian será «controlado» para que no quede inservible

Según el consejero Mikel Jauregi este proceso se hará de una forma en la que «no se va a hipotecar el futuro del horno» y que «facilitará la entrada de nuevos inversores que traigan nueva actividad industrial a esta planta». Sobre esa búsqueda de inversores, Lakua asegura que Guardian «ha aceptado» que sea el Ejecutivo autonómico «quien lidere la interlocución con dichos inversores».

La realidad es que el horno se seguirá parando, pero el Gobierno asegura que el proceder no se hará como inicialmente estaba previsto, algo que habría dejado a esta maquinaria «irrecuperable». En este sentido, Jauregi ha pedido que los trabajadores cumplan con los servicios mínimos porque «es imprescindible que los trabajadores de la planta ayuden y colaboren en este proceso de enfriamiento controlado y paulatino. Es la manera de dar una oportunidad a futuras inversiones».

Para supervisar que el procedimiento preserva el horno, el titular de Industria sostiene que mañana se desplazarán hasta la sede de Guardian «un equipo de técnicos con representación de Osalan, Industria y Medio Ambiente el miércoles por la mañana». Estos profesionales acudirán a «verificar el estado real del horno, estudiar el plan de enfriamiento controlado y hacer un seguimiento de la operación».