El colegio Fabián Legorburu de Areta ya tiene adaptada la antigua casa del conserje, ubicada junto al colegio, como aula de psicomotricidad. La reforma, realizada por el Ayuntamiento, y en la que se han invertido 69.000 euros, responde «a una demanda histórica de ... la dirección del centro», explicó el responsable del área de Educación, Juan Jesús Merchán. El espacio, que estaba distribuido como vivienda con un salón-comedor, cocina, dos dormitorios, baño y terraza, se ha convertido en un espacio diáfano que incluye un baño en el aula y un nuevo equipo de climatización para mantener la temperatura idónea, ya que su uso está destinado a menores de dos a cinco años.
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La antigua vivienda se sitúa encima del sótano, que en la actualidad no tiene uso, pero ha sido necesario resolver el problema de accesibilidad que presentaba, para lo que ha habido que construir una nueva escalera y salvar el metro y medio de desnivel de la vivienda respeto al resto de la urbanización.
La instalación está ya preparada, pero antes de empezar a utilizarla debe equiparse con «colchonetas, murallas de cubos, escaleras, rampas, paralelepípedos, rulos de terapia, arcos de estimulación, piscinas de bolas y espalderas», explicó Merchán, que espera que la dotación se complete en los próximos días.
La obra ha supuesto la reforma interior completa de la antigua vivienda, la sustitución de la carpintería y de la instalación eléctrica.
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