Caña a raudales en el Azkena llodiano

La noche se fue calentado con la presencia de otros alaveses, Xuorum, que fueron encendiendo el ambiente con las canciones de su último disco, 'Veneno'. La noche comenzó con el público un tanto frío, pero Ander Lafuente se los fue metiendo en el bolsillo y acercándolos físicamente hasta el grupo. Su buen hacer logró que la velada terminara en un desenfreno de baile y coros en el que se echaron de menos las cervezas, porque el escenario fue el frontón de Lamuza, donde hacía años que no se celebraba un concierto.

Repasaron temas como 'Me escondo' el que reflexionaron acerca del efecto de la redes sociales y del 'bullying' entre la gente más joven. Xuorum actuó como un flautista de Hamelin cuando los acordes se repartieron por el pueblo y fueron atrayendo poco a poco hasta el frontón a más público que conectó con sus canciones cargadas de crítica social y de ritmos punk. «Tenemos unos estribillos coreables y bailables que hacen que la gente pueda entrar a interactuar con nosotros», explicó el líder de la banda, que se lanzó con dos canciones en euskera, 'Hazi, hezi, ixo, izu' e 'Izate Faltsua' en lo que supuso un recorrido por su discografía que ha pasado por distintas etapas, «aunque todos hemos bebido de La Polla, Kaos Etiliko o los Berri Txarrak», añadió Lafuente.

No dejaron pasar ni una. La actualidad política salió a la palestra con 'Hienas', de su disco ´Menos es más' grabado en 2020, cuando dejaron claro que «nadie es más que nadie» con una vehemencia comprometida con el fin de los fascismos. Desde abajo, el público se sumó a la 'caña' que ofrecía el trío alavés desde el escenario y Lander, Davo y Eneko se lanzaron a satisfacer las peticiones, siempre desde la reflexión y con la intención de «despertar conciencias».

La apoteosis final llegó con 'Más madera'. «No es un adiós/ni un hasta luego./Las despedidas nunca/fueron mi fuerte./Tened salud, si no nos vemos/y si nos vemos/os queremos enfrente». El estribillo se siguió escuchando durante un rato cuando se pagaron los bafles en los alrededores del frontón para dar paso a la actuación de Los Brazos que repasaron su discografía en un recorrido por el rock sureño cargado de influencias llegadas del pop, el folk y el jazz jazz.