Ayala pedirá a Adif que aumente la seguridad en la estación de Luiaondo

La de Luiaondo es una de las estaciones principales de la línea ferroviaria que enlaza Orduña y Bilbao en Álava. El edificio está cerrado desde hace años y los usuarios no disponen de un lugar donde refugiarse en caso de lluvia. Además, los andenes son antiguos y deberían recrecerse para poder acceder con más comodidad a los trenes. Y lo más importante, necesita un paso subterráneo que evite el peligro de cruzar sobre las vías, como se ha hecho en la estaciones de Areta, Llodio y Amurrio. El cruce sobre los raíles también se mantiene en otras estaciones de la línea como las de Santa Cruz, pese a que se han producido arrollamientos mortales.

Renfe anunció a finales de enero pasado que colocará videovigilancia en la estación de Luiaondo, y en otras de la línea, que permitirán «detectar, de manera automatizada, incidentes relacionados con la seguridad como caídas de personas y objetos a las vías, incendios, actos vandálicos o el fraude en el acceso». El sistema estará instalado en el primer trimestre de este año. Serán las próximas mejoras de importancia que se van a introducir en el edificio tras la remodelación de la cubierta que se realizó en 2018.

Mientras la reforma de la estación sigue pendiente, sí se han abordado algunas mejoras en el entorno, como la colocación de un aparcabicis por parte de la Diputación para mejorar la conectividad del valle a través de la línea férrea.

El PNV, que está en la oposición en Ayala, ha exigido «agilidad» al equipo de gobierno que forman EH Bildu y Aiara Batuz para abordar las mejoras que necesita el apeadero en cuanto a accesibilidad y seguridad.

El portavoz jeltzale, Gentza Alamillo, recordó que su grupo incluyó una enmienda en los Presupuestos Generales del Estado el año pasado para que el Ministerio de Transportes destinara dos millones de euros a la estación. Alamillo ha pedido al equipo de gobierno de Ayala que «muestre su máxima disposición con ADIF para las mejoras en la estación», que los jeltzales consideran «clave» para la zona.

También expuso una situación que calificó de kafkiana. «A primeros de enero, el Ayuntamiento registró una solicitud de Adif preguntando por una persona con la que pudiese ejercer una labor de interlocución. Algo que generó una situación surrealista, puesto que dejó patente en el propio Pleno que los actuales mandatarios no estaban al tanto de dicha solicitud».

La Corporación también incorporó el año pasado al presupuesto municipal una partida para redactar el proyecto de ampliación del parking, que «no se ha desarrollado», denunció Alamillo, con la misma idea de mejorar la conectividad.