La asamblea de la cofradía de la Virgen Blanca rechaza la única candidatura

A la reunión han asistido un total de 120 cofrades, una asistencia muy superior a las convocatorias habituales. Fernández de Pinedo necesitaba más del 60% de los votos afirmativos para ser elegido abad, esto es, 73 papeletas a su favor, según establecen los estatutos de la institución religiosa. Se ha quedado muy lejos del objetivo después del recuento. Sólo ha cosechado 46 síes. En realidad han sido más los noes (59), con 13 votos en blanco y dos abstenciones.

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La votación de un nuevo abad ha superado todas las expectativas de la asamblea ordinaria de la cofradía de la Virgen Blanca. Prevista su celebración en la pequeña sala en el acceso al Museo de los Faroles, se ha tenido que trasladar al interior del recinto para acoger a los asistentes, que se han repartido entre las carrozas y luminarias de la majestuosa procesión de cada 4 de agosto. El capellán de la institución, José Ignacio López de Maturana, ha ofrecido un rezo a los presentes. Acto seguido, Ricardo Sáez de Heredia ha agradecido la asistencia así como el reto alcanzado gracias a la gestión de sus sucesivas juntas y el apoyo de los devotos de una cofradía lista para los desafíos del siglo XXI.

«Siempre mirando hacia adelante», ha expresado el abad saliente. Cada miembro del equipo de gobierno ha detallado después su papel a lo largo del año 2024. Se ha constatado que el Museo de los Faroles recibe cada vez más visitantes, con un número significativo de extranjeros. Está cerca de cerrar el ejercicio con 30.000 personas. Y también ha quedado de manifiesto que el colectivo católico dispone de una tesorería saneada, con dinero en caja, gracias en gran parte a la aportación anual de los 2.800 cofrades de que dispone.

El aspirante a la abadía ha procedido seguidamente a presentarse en sociedad. Fernández de Pinedo ha desarrollado en los últimos años diferentes funciones como miembro de la junta de la cofradía de la Virgen Blanca, además de ser un activo cofrade de la hermandad penitencial del colegio San Viator, la cofradía de Nuestro Señor con la Cruz a Cuestas. En su disertación ha apostado por una línea continuista y se ha mostrado partidario de facilitar la accesibilidad a la iglesia de San Miguel, la parroquia que honra a la Virgen Blanca, a las personas con movilidad reducida. Las escaleras que conducen al templo son un obstáculo para muchas personas. Después de su intervención se ha procedido a la votación. Los cofrades asistentes no han apoyado su propuesta, con lo que la directiva de Sáez de Heredia está obligada a seguir en funciones y emprender otro proceso electoral para dar con el relevo.