198 apartamentos junto al Iradier Arena para universitarios y turistas

La compañía vasca Kategora, dedicada a la gestión de patrimonio inmobiliario, lidera el proyecto en el que también participan inversores vitorianos. Para este solar ubicado en la manzana de la plaza de toros, que tiene una edificabilidad de 6.800 metros cuadrados -la superficie construible es de 9.600-, ya se contempló hace años un hotel y la cadena Abba solicitó en 2010 licencia para construir un cuatro estrellas de siete plantas y 133 habitaciones.

El sector evoluciona «y nosotros apostamos para Vitoria por un modelo de comunidad, de crear un ecosistema» donde tengan cabida residentes universitarios, principalmente durante el curso -la ciudad tiene unos 4.400 estudiantes de fuera y unos 140 alumnos de Erasmus-, junto a «otro tipo de público como emprendedores o trabajadores jóvenes que llegan para unos periodos de estancia más o menos largos». Y en los meses de verano también tendrían cabida turistas, explica Kepa Apraiz, socio fundador de Kategora.

Porque una de las características del futuro complejo es su «versatilidad». Dos de las nueve plantas se destinarían de salida para la explotación hotelera y el resto para alojamientos de larga estancia «pero en función de las necesidades, se podría adaptar» el reparto de los apartamentos. Este modelo de negocio ya lo explota Kategora «con éxito» en Budapest y también está destinado a un cliente joven.

En el edificio de la plaza del Renacimiento los estudios tendrán unas dimensiones de unos 24 metros cuadrados -son para una persona-, en los que habrá una cama, un sofá cama, una 'kitchenette' -pequeña cocina a veces oculta tras una puerta como si fuera un armario- y un baño. Y en las zonas comunes, además de recepción, habrá cafetería, un 'txoko' para que los residentes puedan socializar entre fogones, una zona de 'coworking' con internet y wifi «y está por ver si también incorporaríamos una sala de proyecciones y una piscina», apunta. Un parking con medio centenar de plazas completaría la oferta.

En septiembre presentarán el proyecto al Ayuntamiento de Vitoria y esperan recibir en un plazo máximo de seis meses la licencia para iniciar la construcción. A partir de entonces, «dos años de obras» para intentar que en el primer semestre de 2022 este nuevo apartahotel se ponga ya en marcha.

Los precios que calculan en Kategora para el alquiler de estos estudios durante el curso universitario oscilan entre 500 y 600 euros, «cuando una habitación en un piso de estudiantes está de media en Vitoria por unos 350». Apraiz considera que «por algo más de dinero vamos a ofrecer mejores servicios, más personalizados y se puede crear un ecosistema agradable». En el caso de las cortas estancias, el precio rondaría los 50 o 60 euros por noche.

Los 198 apartamentos junto al Iradier Arena se sumarán a los 121 del antiguo hotel Gasteiz en la Avenida con lo que la oferta actual de este tipo de alojamientos se duplicará. Ahora suman más de 300 entre las habitaciones que destinan a larga estancia los hoteles Lakua y Jardines de Uleta y los apartahoteles de Diván, Irenaz, San Fermín, Dream Park o Jardines de Aristi.

El solar junto al Iradier Arena «tiene un enorme potencial de revalorización como consecuencia del soterramiento de las vías del ferrocarril». Los promotores del proyecto recuerdan que la parcela «se ubica justo en la salida de la rampa que conectará la nueva estación con el parking -de la plaza de toros-, así que el primer edificio que pueden ver mucho visitantes al llegar a Vitoria será el nuestro».

Eso sí, para que el tren entre a la ciudad por el subsuelo habrá que esperar, al menos, hasta 2023. «Pero lo importante es que se vayan dando pasos», dice Apraiz, que también cree que el Tren de Alta Velocidad «puede ser muy importante no solo para Vitoria sino para Bilbao y Donosti. La comunicación entre las tres capitales mejorará y puedes estar alojado en Vitoria aunque tengas un evento en otra ciudad».

Kategora replicará en el edificio de la plaza del Renacimiento un modelo que «nos está dando resultados en Budapest». Entre la capital húngara y Varsovia, en Polonia, la empresa vasca tiene cuatro apartahoteles con más de 800 plazas en total. Esta compañía gestiona actualmente 120 millones de euros en capital inmobiliario de su medio millar de clientes en Euskadi y Madrid principalmente.