Alestis anuncia un ERE y profundiza la crisis aeronáutica vasca

El coronavirus ha dejado en la pista a millones de pasajeros en todo el mundo y, con ellos, un negocio con importantes raíces en Euskadi. De hecho, la IATA (International Airport Transport Association) prevé una reducción del 48% en el tráfico anual de viajeros en 2020 respecto al año anterior. Con este negro panorama son ya varios los fabricantes aeronáuticos que han tomado medidas, como la alavesa Aernnova, que reducirá un 20% su plantilla global, o la vizcaína ITP, que estudia reducir la suya en un 15%. Este mismo lunes, la burgalesa Aciturri, con planta productiva en Berantevilla (Álava), comunicaba su intención de no ampliar su actual ERTE más allá del 30 de septiembre e iniciar también un ajuste de personal en vista de que su carga de trabajo había caído un 45%.

Aciturri es precisamente la accionista mayoritaria de Alestis que, además de su sede en Miñano con cerca de 200 empleados, posee instalaciones en Sevilla, Getafe, Puerto Real, Puerto de Santa María y Sao José dos Campos (Brasil). La compañía explica, en una carta enviada este martes a los representantes de los trabajadores repartidos por estas plantas para comunicar el ERE, cómo el sector se ha enfrentado en los últimos meses a retrasos y cancelaciones de pedidos como consecuencia de la reducción del tráfico aéreo, una situación que ha afectado a toda la cadena de suministro.

Alestis, asegura la propia firma, «ha ejecutado numerosas medidas para afrontar este escenario y la responsabilidad de la empresa es continuar realizando los esfuerzos necesarios para adaptar el exceso de capacidad productiva a las previsiones de los años venideros para así proteger la supervivencia de la empresa a largo plazo». El ERE, sostiene, es la solución para responder a esa reducción de la carga de trabajo que arrastra por la pandemia.