Semana de la Movilidad

Los alaveses usan cada vez más el coche

Pero los datos también indican que aún queda tarea por delante. Porque el coche sigue liderando el ranking en el territorio, con el 42% del tráfico de desplazamientos diarios. No hay que olvidar que Vitoria es la capital vasca donde más se usa el coche: más de un tercio (35%) de los desplazamientos de los vitorianos son en coche, muy por delante de Bilbao (10,4%) y San Sebastián (35%). Si echamos la vista atrás, la fotografía no es mejor. En 2016 el uso del coche en la provincia era de un 33%, es decir, lejos de menguar su uso ha crecido un 9% en el último lustro. Aunque hay que tener en cuenta que este informe de Eustat recoge datos relativos a 2021, marcados por la pandemia y que muestra este empeoramiento también en el resto de Euskadi.

Así que hoy, el día sin coche, con el que se pone punto final a la Semana Europea de la Movilidad cuyo lema es 'save energy' (ahorra energía), se presenta como una gran oportunidad para animar a más alaveses a desgastar zapatillas, ponerse el casco de la bici o abonarse al transporte público. Motivos para este último hoy no faltan. El billete en las líneas de Alavabus y el transporte comarcal será durante todo el día gratuito. Asimismo, aquellos que se suban a los urbanos de TUVISA, incluido el BEI, y el tranvía tampoco tendrán que picar la BAT. El objetivo es que el lunes, cuando toque volver al trabajo, sean más los que no quieran arrancar el coche.

Dentro de este club sostenible, lo más numerosos son los peatones. Salir de casa y llegar a pie al destino paseando por la calle es algo de lo que pueden presumir cuatro de cada diez alaveses. Se despreocupan de los atascos y el quebradero de cabeza de aparcar. La bici se presenta también como una alternativa con músculo: 61.272 desplazamientos se contabilizan a diario. No es una cifra baladí. Álava es el territorio donde más se usa la bici (el 6% del total), triplicando porcentualmente a Bizkaia.

«Te ahorras tiempo y dinero»

Es el caso de Edgar Da Silva, quien pedalea desde el Casco Viejo de Vitoria hasta su puesto de trabajo en el Polígono Industrial de Júndiz. 8,7 kilómetros que siempre hace en las dos ruedas, «haga sol o llueva». «Tardo 30 minutos y es un camino tranquilo. Y mira, me ahorro el tener que ir al gimnasio», bromea. No es el único. «Durante el trayecto me cruzo con una decena más, es cómodo», confiesa. Para Juan Latorre es su herramienta de trabajo. «Es vital en una ciudad como Vitoria. Y te despreocupas de tener que mirar el precio de la gasolina», argumenta este repartidor y cofundador de la empresa Eraman, en la que hacen repartos siempre en las dos ruedas.

El informe no recoge a los patineteros, un grupo que supera el millar solo en Vitoria. Gorka Pradas se desplaza desde Dulantzi hasta Vitoria pulsando el botón para acelerar. «Me da mucha libertad y disfruto del trayecto, porque que me lleva por la vía del Vasco-Navarro . Y si veo que llueve, lo pliego y lo monto en el autobús». Luego cuando llega a la ciudad, también se desplazada en el patinete, como David Álvarez. «Lo uso a diario, te ahorras mucho tiempo y dinero. Mira, yo una vez por semana quedo con los amigos para jugar a baloncesto en el polideportivo de San Andrés. Desde las universidades tardo solo diez minutos», apunta.

La comodidad es aún mayor para los que pican la BAT y se suben al autobús, al tren o al tranvía. De lunes a jueves, el transporte público facilita cerca de 100.000 desplazamientos en el territorio. Un tráfico en el que la capital tiene mucho peso con Tuvisa y el tranvía, que mantendrán las bonificaciones del 50% al menos hasta final de año. También los Álavabus. «Uso el tranvía para ir al trabajo a Florida. ¿En coche? Ni me lo planteo», comenta Arantza Díez, vecina de Arriaga.

La expansión del metro ligero a Salburua beneficia a 20.000 vecinos del Este, pero también a trabajadores de la zona. «Cojo el tranvía en la puerta de casa, en la zona de Universidades, y me deja en la puerta del trabajo, en la parada Nikosia. Cuando vi que se estrenaba dije: esta es la mía», evoca Ionut Domingo. Porque antes realizaba este recorrido en bici o en patinete. «No me gusta conducir, prefiero ir en transportes ecológicos», concluye.