Álava no logra un acuerdo para defender la conexión del TAV entre Vitoria y Pamplona

Pero existe una diferencia evidente. Y es que los partidos que sustentan al Gobierno foral optan por la prudencia a la espera de unos informes técnicos que se publicarán «en los próximos meses». Los conservadores, por su parte, consideran que hay que fijar posición como territorio. «En Gipuzkoa, PNV y PSE instan a que se aceleren las obras y que la conexión vaya por Ezkio-Itsaso, pero aquí son incapaces de defender un texto de mínimos para reivindicar que la conexión sea por Vitoria», criticó el presidente de los populares en el territorio, Iñaki Oyarzabal. Si bien, el PP ha defendido en las últimas semanas la opción de Ezkio tanto en Gipuzkoa como en Navarra, mientras su líder autonómico, Javier de Andrés, se ha mostrado a favor de Vitoria como «una opinión personal» y no como postura «oficial» de la formación.

La prudencia de jeltzales y socialistas se asemeja a la posición adoptada en las últimas semanas por el diputado general de Álava, Ramiro González. Este ha huido de la polémica mientras aguarda a que se publiquen los informes del Ministerio de Transportes que dirige Óscar Puente (PSOE), que en varias ocasiones ha deslizado que la conexión vitoriana es la «más plausible». Esto, sin embargo, contrasta con la actitud de su homóloga guipuzcoana, Eider Mendoza, que en los últimos meses ha reiterado en múltiples ocasiones su defensa sobre Ezkio-Itsaso hasta el punto de considerarlo como una cuestión «irrenunciable».

El PNV y PSE se limitaron a apoyar un texto, que también decayó, y que apostaba por esperar a disponer de los informes técnicos para afrontar «sin estridencias» el debate sobre cuál es el trazado idóneo para el TAV. «Creemos que es necesario esperar a ver los informes de unos técnicos cualificados, que se harán con rigor y seriedad», reclamaba el peneuvista Iñaki Ruiz de Galarreta. Eso sí, el socialista Josu López Ubierna, compañero de partido del ministro Puente, indicó que Vitoria es la «mejor opción» por su coste económico y medioambiental frente a la solución guipuzcoano que, entre otras cuestiones, obligaría a abrir un túnel de 21 kilómetros bajo la Sierra de Aralar, un tesoro ecológico. Ubierna defendió que su opinión se basa en «informes técnicos» y no en «posicionamientos políticos».

Mientras jeltzales, socialistas y populares centraban sus intervenciones en defender el TAV entre Vitoria y Pamplona, EH Bildu y Elkarrekin pidieron que se aproveche la vía actual. «Esto no se trata de hablar del tren chu-chú, sino de Alta Velocidad», les reprochó Oyarzabal a la vista de que el debate se desviaba y que la votación no iba a deparar ninguna clase de acuerdo.

José Damián García Moreno, de Elkarrekin, sí que cargó con dureza contra Ezkio-Itsaso. «Nadie en su sano juicio, salvo alguien con ocultos y espurios intereses, debería abogar por hacer algo así entre Euskadi y Navarra por debajo de la Sierra de Aralar», criticó y vaticinó que podría convertirse en un 'Pajares 2', en referencia a la obra que afectó a varios acuíferos entre León y Asturais. EH Bildu, por su parte, se mostró «abiertamente» en contra del TAV y esgrimió que la construcción de un nuevo corredor supondrá un gran coste económico, social y medioambiental para el País Vasco.