La afluencia por Semana Santa y la escasez de buses desbordan el parking de Foronda

La terminal de la Llanada preveía alcanzar los 5.000 viajeros en el presente 'puente' y recuperar cifras previas a la pandemia, pero parece que nadie reparó en que estos principalmente iban a llegar en vehículo particular ante la posibilidad de aparcar gratuitamente y sobre todo por culpa de la escasísima oferta de transporte público que existe. Es cierto que hay un autobús que recoge viajeros en la antigua gasolinera Goya y la estación de Lakua para llegar hora y media antes de la salida de los vuelos regulares, pero no cuando se trata de servicios chárter. Y en las últimas jornadas ha habido media docena de conexiones especiales con Edimburgo (Escocia), Zágreb (Croacia), Budapest (Hungría) y Estambul (Turquía) que iban al 100% y sumaban casi un millar de viajeros al tránsito habitual.

«La gente estaba llegando con margen suficiente para hacer la facturación, pero se han angustiado al no saber dónde podían dejarlo. Algunos son de Gipuzkoa o La Rioja, no tienen otra opción que aparcarlo donde podían», atestiguaba Ramón, un usuario que tuvo mejor suerte porque él se quedaba en Vitoria mientras su mujer y su hija volaban a orillas del Bósforo. «Si se hace promoción de Foronda, habría que apostar también por ampliar el aparcamiento o contar con un servicio de transporte público a la altura para evitar este tipo de situaciones», exigía por su parte José, que entraba a la carrera en la terminal donde le esperaba el resto de su familia.

Los conductores menos previsores 'invadieron' los terrenos de Antezana, alguno optó por dejarlo en el parking del centro comercial Gorbeia y otros volvieron a la carrera hasta Vitoria para que alguien les devolviese al aeródromo. Los más pacientes, mientras tanto, rondaban entre las filas del parking a la espera de que se quedara libre alguna plaza. Ese fue el caso de María, que tras dos semanas en las Islas Canarias movió su coche. Y es que una de las fortalezas que se destaca en algunas páginas web es que «a diferencia de lo que sucede en la mayoría de España» cuenta con un parking gratuito, donde se puede dejar el coche «durante el tiempo que desee y sin ningún tipo de restricción. Esto hace que el parking sea ideal para dejar el coche durante tu viaje».

De los 48 aeropuertos de Aena, sólo hay trece en los que no hay que pagar por estacionar el automóvil. Además de Vitoria se encuentran Albacete, Algeciras, Badajoz, Burgos, Ceuta, Córdoba, El Hierro, Huesca, La Gomera, León, Logroño y Madrid-Cuatro Vientos. En Loiu, donde ahora mismo no hay plazas libres, dejar una semana el coche cuesta un mínimo de 40 euros.

La anterior vez que Foronda acumuló actividad extraordinaria fue en el Puente de la Constitución y entonces falló el sistema informático. Ahora se han detectado sus carencias de aparcamiento y en San Prudencio, en once días, se enfrenta a una nueva prueba de fuego con vuelos chárter –donde aparece como novedad El Cairo– que se acumulan a las líneas regulares a Gran Canaria, Sevilla, Málaga y Palma de Mallorca junto a los destinos internacionales de Charleroi (Bélgica) o Bérgamo-Milán.