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1970
El domingo 30 de noviembre de 1970 se celebró con gran boato y vistosidad el pleno de las Juntas Generales de Álava, llamado también de Santa Catalina. Antes hubo misa, en la Catedral de Santa María, precedida de procesión con el estandarte del patrón San ... Prudencio. Se abrió para la ocasión la puerta de Santa Ana, recuperada en los años 60 después de quedar oculta tras unas obras en el siglo XIX. Formaron en dos filas los procuradores de Hermandad, seguidos del síndico. Después, la Diputación, seguida del Ayuntamiento de Vitoria y ambas Corporaciones, precedidas de su correspondiente séquito: miñones, maceros, clarineros, atabaleros y txistularis. Y, finalmente, las autoridades. Concluida la misa, los junteros regresaron a la Casa Palacio donde el presidente de la Diputación destacó la preocupación por el problema del agua y la industrialización pretendida para el desarrollo provincial. También trataron temas de agricultura, ganadería y montes, el plan de mejora de las carreteras y las conversaciones con el Ministerio de Hacienda para la revisión de cupos, dentro del concierto económico con el Estado.
El diputado informó en el pleno que «las gestiones del nuevo aeropuerto continuaban prometedoramente» y esperaba que «el asunto quedara resuelto en breve». El aeródromo vitoriano se inauguró el 6 de abril de 1980 con un vuelo de Iberia que cubrió el trayecto entre Vitoria y Madrid.
1965
El Teatro Guridi acogió en la matinal del domingo 3 de enero de 1965 el 'Festival Juvenil de la Canción Moderna' organizado por el curso preparatorio de la Escuela de Peritos Industriales de Vitoria. Con el teatro lleno, los jóvenes tomaron parte con «gritos, voces, palmadas y otros excesos no tolerables en un coliseo con los actuantes, con la repulsa de muchos de los asistentes». Parte del público «abucheó y protestó airadamente las decisiones del jurado al dar el resultado de los premiados». La crónica califica el espectáculo de «lamentable», en el que hubo «muestras de marcado gamberrismo por una parte del público», que hizo incluso acabar «apuradamente» a un conjunto. Al margen de esos actos, fue un éxito de taquilla -la butaca era a quince pesetas y el día invitaba a buscar el calor de un teatro-. Fueron premiados, por conjuntos, Los diablos salvajes, que se llevaron 2.500 pesetas (15 euros), y Los Iris, con mil (6). En solistas ganó Carlos Larrapuchi, premiado con mil pesetas, y Óscar Alexandre, con 500.
También actuaron como solistas José Antonio Terrones, José María San Saturnino y Jesús Alberdi, y gustó mucho la actuación de Miguel Ángel Bartolomé. Tocaron conjuntos como The boby Roker, al que la intervención del público precipitó su final, Los Incógnitos, Los Victori y Shanti y Angel.
1956
El espectacular aumento demográfico de Vitoria hizo que en sólo trece años la Residencia de la Seguridad Social 'Ortiz de Zárate' se quedara pequeña. Se estrenó el 23 de agosto de 1956 para una ciudad de 60.000 habitantes, pero en 1969 el número de beneficiarios ya llegaba a los 135.521. Por ello, el porcentaje de utilización subió del 26 al 97 % y algunos servicios ya no resultaban satisfactorios, como los de maternidad o pediatría. La ampliación se hacía ineludible. Una vez realizada, el 29 de agosto de 1969, se inauguró un nuevo bloque paralelo que enlazaba con el edificio antiguo y albergaba 100 camas. Lo inauguró el ministro de Trabajo Jesús Romeo Gorria -con traje en la foto-, que acudió al campo de Arana donde fue recibido por la banda municipal de txistularis y entró en el nuevo pabellón bajo los arcos formados por el grupo provincial de danzas. El coste de las obras ascendió a 35 millones de pesetas (unos 210.000 euros) y permitió ampliar la capacidad hospitalaria hasta las 250 camas.
Cuatro traumatólogos, un jefe de laboratorio, uno de radiología, cuatro anestesiólogos, cuatro cirujanos, dos ginecólogos, cuatro oftalmólogos, cuatro otorrinolaringólogos, un jefe de hospitalización pediátrica, tres tocólogos y cuatro médicos residentes. Enfermeras, auxiliares, matronas y religiosas.
1951
En 2011, tras 60 años de actividad en la capital alavesa, Esmaltaciones San Ignacio cerró sus puertas. Esta empresa, creada en 1944 en Oñate y radicada en Vitoria desde 1951 hasta 2011, fue una de las más importantes del tejido industrial vitoriano. Creó algunas de las baterías de cocina más modernas y avanzadas del siglo XX, fue la primera fábrica española en lanzar al mercado la tradicional batería de ocho piezas y fue pionera en utilizar recubrimientos antiadherentes. En su fábrica de Olárizu se elaboraban cacharros de cocina con esmalte vidriado que ahora son piezas de coleccionistas: platos, tazas, ollas, palanganas, fuentes... En marzo de 1973, fecha de la foto, fue propuesta para la Gala del Deporte como mejor empresa, junto a Imosa y Forjas. No ganó, pero de ella se decía que era ejemplar en aspectos como en el apoyo deportivo a sus secciones de fútbol y baloncesto por su alto porcentaje de trabajadores jóvenes. En 2005 se trasladó a Júndiz y en 2011 cerró cuando todavía tenía 89 operarios.
En 1957 era una de las ocho principales empresas de Vitoria con 363 operarios. En 1971, su plantilla alcanzaba las 1.292 personas, de las que 368 eran mujeres y en 1975 era la cuarta factoría de Vitoria con 1.215 trabajadores. Fue tal el referente que Esmaltaciones sigue dando nombre a la zona donde se asentó.
1973
Decenas y decenas de jaulas hicieron de los salones de cultura en la calle Olaguíbel 8, propiedad de la Caja de Ahorros Municipal, una inmensa y hermosa pajarería que atrajo la visita y la atención de vitorianos de todas las edades entre el 15 y el 19 de enero de 1973. En una semana tan heladora, de hecho nevó aquellos días en la ciudad, se celebró la decimocuarta edición del Concurso-Exposición de Canaricultura y Pájaros Silvestres y Exóticos que tanta aceptación tenía entre los criadores locales y foráneos y el público que lo contemplaba ensimismado. Fueron inscritas más de 400 aves, sobre todo canarios, un número superior al de ejercicios pasados en consonancia con una afluencia de curiosos también más concurrida. Con organización del grupo de canaricultura del Sindicato Provincial de Ganadería y patrocinio de la obra social de la Caja Municipal, el jurado calificador se tomó su tiempo para evaluar cada pájaro presentado a concurso y determinar su puntuación. Por un lado se tuvo en cuenta el tipo de canto, lo más preciado del canario, con sus variedades roller, malinois y timbrado español. Y por otro se reconoció el color y la postura de cada ave. Se valoraron cuatro razas por su plumaje: lipocrómicos (amarillo, rojo, blanco recesivo y blanco dominante con una pinta amarilla en la punta de las alas), melánicos (marrones, grises, verdes y castaños), híbridos y nuevos colores. La canaricultura es la rama de la avicultura que atiende a la cría del canario doméstico.
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