2.559 opositores acuden a Vitoria en busca de una plaza en Osakidetza

A las puertas del aulario y en un abrir y cerrar de paraguas constante, cientos de personas miraban los últimos apuntes antes de un examen clave para su futuro profesional. Opositoras, sobre todo, como Beatriz Redondo. Esta cántabra, que ya ha trabajado en la sanidad pública de Euskadi, cree que no va a tener plaza. «En mi caso, como la puntuación se suma luego para la lista de contratación, lo intento dar todo para tener las máximas oportunidades», señalaba.

Beatriz reconoce que «es un poco cansado que cada año hayamos tenido una oposición». No obstante, «las ganas de estar afianzadas» son las que mueven a sentarse a estudiar. Junto a ella viene Alaitz Fernández, vecina de Algorta. Lleva «poco» tiempo preparándose las oposiciones y cree que no opta a plaza, pero también busca estar arriba en las listas de contratación. «Sé que no es mi OPE, habrá más, pero intentaremos hacerlo lo mejor posible», señala antes de entrar a las aulas.

En una jornada que coincide con las movilizaciones de la plataforma Osasun Publikoa Aurrera, la comidilla de las conversaciones pasaba por una sensación generalizada de que quedan cosas por mejorar en Osakidetza. No obstante, Beatriz y Alaitz coinciden en que el servicio de salud sigue siendo una opción atractiva en un momento en el que toca «bajar la eventualidad». «He trabajado en varias comunidades y sigue siendo un sistema de salud bien montado en comparación con otras comunidades. A mí me sale del sentimiento, de las ganas de sentirte parte de algo grande», señalaba Beatriz.

Una vez dentro, los nervios creen y los decibelios bajan. Los más previsores charlan dentro y fuera de las aulas. Una madre incluso aprovecha esos últimos momentos para amamantar a su hijo pequeño. Otros dan una última vuelta a los apuntes y otro como Andrés Borja todavía jadean después de la carrera por llegar a tiempo a un examen clave. Ecuatoriano y residente en Vitoria, asegura antes de entrar a la prueba que lo lleva «bien y con ilusión».

El de Borja es el segundo intento por hacerse con un puesto tras los exámenes de la OPE de 2017-2018. Lleva ocho meses preparándose y reconoce que es «duro», «pero no hay más, el sistema es así». Justo cuando termina de saludar ha sido cuando ha entrado la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, que se ha pasado por algunas de las aulas reservadas para las pruebas de hoy.

Tras el turno de este sábado, las pruebas continuarán mañana domingo con dos tandas: una a las 9:30 horas y otra a las 13:30 horas. Por el momento las pruebas no han registrado ninguna incidencia. En los últimos exámenes realizados en Vitoria, la prueba se tuvo que retrasar hora y media por un problema técnico a la hora de imprimir los exámenes.