El Ayuntamiento sube el IBI un 28% a más de 20.000 pisos protegidos y 7.600 garajes

Belandia explicó que el IBI de la VPO no siempre se calcula en funeción de su valor catastral, como sí sucede en los pisos libres, sino que es el Gobierno vasco quien fija el denominado precio máximo de venta, de manera que el cálculo del recibo del IBI «se realiza teniendo en cuenta esta cuantía». Si ese valor que determina Lakua es inferior al catastral, «será el primer valor el que se tome como referencia para calcular la cuota del IBI. Así se ha venido haciendo y como el Gobierno vasco no acababa de revisar este valor se ha venido introduciendo una brecha recaudatoria, que ahora se corrige». El número dos de Gorka Urtaran agregó que estos módulos no se habían revisado «desde el año 2005», aunque durante el ejercicio pasado se hizo una actualización que incrementó estos valores. Esta revisión, indicaron portavoces del PNV, fue acordada por las instituciones para avanzar en el plan de lucha contra el fraude.

Este aumento del IBI llevaba días en boca de varias asociaciones de vecinos, que alertaron de que muchos ciudadanos estaban preocupados porque habían recibido una notificación del Ayuntamiento en la que se les informaba de un próximo cobro del tributo que, en un principio, consideraban «equivocada». Efectivamente, el equipo de gobierno confirmó ayer que hay casos en los que el IBI de la VPO se incrementará en 2016.

«Ajustar» el impuesto

En concreto, el Consistorio ingresará 951.956 euros más de lo que había previsto después de que, en un primer tramo, 16.947 viviendas protegidas hayan adecuado sus precios una media del 29,2%, de tal manera que el recibo medio pasará de 192 a 248 euros. En otro tramo se encuentran otros 3.134 pisos que generarán un aumento de recaudación del IBI de 137.937 euros, con una variación del 23,5% que elevará la factura media de 186 a 230 euros. Las tablas también incluyen 7.706 garajes que aportarán un dinero extra al Consistorio de 68.106 euros, ya que su cuota media pasará de los 25 a los 34 euros, un 35% más. La suma total es de 1.158.005 euros adicionales para el Ayuntamiento tras un incremento del 28,7%.

Precisamente, los grupos municipales se reunirán hoy en el marco de la ponencia de fiscalidad para hablar del IBI. El Gabinete Urtaran ya dijo que intentará mantener los ingresos de la también llamada contribución -45,5 millones previstos a principios de este año, a falta de las nuevas variaciones- a pesar de que los valores fiscales de los pisos hayan caído una media del 35%. El PP salió al paso el lunes para asegurar que si el IBI no baja «será un atraco», algo que el alcalde tachó de «populista» porque esa repentina caída de ingresos «obligaría a cerrar servicios públicos como centros cívicos».

Ayer fue el PSE quien adelantó las líneas maestras de la postura que adoptará en el debate. El portavoz socialista, Peio López de Munain, apostó por un IBI «más justo y progresivo» que sirva «para mantener los actuales niveles de recaudación», de tal manera que el Ayuntamiento «puede seguir garantizando la prestación de los servicios municipales y la puesta en marcha de otros nuevos». El concejal adelantó que no respaldará medidas «populistas e irresponsables que sólo pretenden dejar sin recursos al Consistorio», en clara referencia a la propuesta del PP.

López de Munain dijo que es necesario «ajustar el IBI a la realidad de la ciudad, de tal manera que quienes vivan en zonas con menos renta no paguen más que otras personas que viven en barrios con mayor nivel económico; a lo que puede ayudar la reciente revisión del catastro, tasando correctamente los inmuebles con sus valores reales». El edil agregó que «no es de recibo que un impuesto con un fin justo -contribuir para poder recibir determinados servicios-haya dado lugar a que ciudadanos con rentas bajas y medias, propietarios de inmuebles con muchas carencias pero bien ubicados, tengan que pagar elevadas cantidades».