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elcorreo.com
Jueves, 7 de abril 2016, 11:09
La marcha de Borja Belandia, número dos del Gobierno de Gorka Urtaran, no es una salida cualquiera para el Gabinete del PNV, que con cinco concejales es el más escaso de cuantos han dirigido la ciudad desde la restauración democrática. Belandia, que regresará a su ... puesto de alto funcionario foral, ha acumulado las carteras de Hacienda, Urbanismo, Medio Ambiente y Seguridad Ciudadana, más la dirección del Centro de Estudios Ambientales y de la sociedad pública de autobuses urbano Tuvisa, un paquete de responsabilidades que en otras épocas recaía hasta en cuatro personas distintas. Su marcha, según enfatizan de forma amistosa y largamente meditada, es un roto que obligará a Urtaran a recomponer su Ejecutivo cuando aún no se ha cumplido un año de Gobierno.
Belandia saldrá a primeros de mayo y accederá al equipo ejecutivo Itziar Gonzalo, en la actualidad coordinadora general del Área Económica y de Administración Municipal. De momento, el alcalde no ha confirmado cuál será el nuevo reparto de responsabilidades, mientras mantiene su oferta al PSE para que entre a cogobernar en Vitoria, a la que los socialistas se han mostrado remisos en los últimos meses.
Las valoraciones de los grupos municipales a la exclusiva de El Correo no se ha hecho esperar. Desde EH Bildu, la formación que con sus votos impulsó la investidura de Urtaran como alcalde, creen que la salida de Belandia «ahonda en el agotamiento del Gobierno, que pierde a una pieza clave». «Un posible entrada del PSE solo lo debilitaría aún más», ha señalado la portavoz en Vitoria, Miren Larrion. La edi ha reiterado que el caminoque debe seguir Urtaran es el marcado por lo que denomina «las fuerzas del cambio», en las que inclutye, además de la formación abertzale, a Podemos e Irabazi. «Esta es la vía que necesita Gasteiz, un trabajo honesto y conjunto para todos los gasteztarras».
«Sorpresa»
Desde el PP, el portavoz Javier Maroto, ha valorado que la marcha de Belandia augura un «mal futuro para ese gobierno inestable e interino» de Gorka Urtaran. «Eran cuatro y el del tambor y se va el director de orquesta, el único que valía», apuntó el líder conservador. «Estamos pagando los vitorianos la consecuencias de aquella decisión de quitar del gobierno al que habia sido premiado por los ciudadanos. En su lugar hay un gobierno cada vez más interino, más débil sin proyecto de ciudad».
Los socialistas manifestaron su «sorpresa» por la salida de Belandia y apuntaron que se trata de un buen gestor que ha «trabajado muy bien» en este arranque de legislatura, ha señalado Peio López de Munain.
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