efe
Martes, 12 de mayo 2015, 13:45
El presidente de la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo, Mariano Palacín, ha dicho este martes que el alcalde de Vitoria, Javier Maroto (PP), "se tiró a la piscina" cuando anunció públicamente que la ciudad iba a entrar en el libro Guinness con ... la tortilla de patata más grande del mundo.
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Palacín y Pedro Palacios, otro de los directivos de la Capital Española de la Gastronomía, han informado esta mañana de las gestiones que están llevando a cabo ante lo que consideran un "atropello" por parte del Ayuntamiento de Vitoria. La Capital Española de la Gastronomía, que organizó el intento de récord Guinnes con la tortilla más grande del mundo el pasado 2 de agosto para promocionar Vitoria, considera que el Ayuntamiento, y más en concreto su alcalde, ha incumplido el convenio que firmaron ambas partes para colaborar en acciones de promoción del título.
El Ayuntamiento de Vitoria y la Capital Española de la Gastronomía discrepan sobre las obligaciones que se fijaron en el convenio y que establecía que la capital alavesa debía pagar 125.000 euros por llevar esta marca durante un año y organizar conjuntamente actividades de promoción en torno a ella. Maroto entiende que lo prometido era conseguir el récord Guinness con la tortilla de patata que cocinó el alavés Senén González y se niega a pagar los 50.000 euros que le faltan de abonar a esta asociación porque considera que no se ha hecho bien el trabajo al no conseguirse este objetivo.
Sin embargo, los directivos de la Capital Española de la Gastronomía han insistido hoy en que no pudieron ofrecer garantías de conseguir ese récord porque era algo que no estaba en su mano y que, además, en el convenio suscrito no existía ese compromiso. En esta línea, han entregado el protocolo de colaboración relativo a la Capitalidad Española de la Gastronomía y en su anexo se recoge que se facilitarán a Vitoria "propuestas e ideas para el desarrollo y la organización del intento de batir el 'World Record Guinness' que aporte notoriedad y promoción para la ciudad".
Palacín ha explicado que una de las ideas, pero no la única, era la de hacer la tortilla de patata más grande del mundo y que el alcalde de Vitoria, en un acto público en Madrid, lo anunció, por lo que ya se tuvieron que desechar las otras propuestas. A partir de ahí comenzaron a hacer las gestiones con la organización de Guinness y supieron que tenían que batir la marca de una tortilla hecha en Japón de 14.000 kilos.
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Palacín y Palacios han anunciado hoy que van a esperar a que la institución del Ararteko se pronuncie sobre este caso y han dicho que si no hay acuerdo con el Ayuntamiento acudirán a los tribunales para reclamar los 50.000 euros que se les adeuda. Palacios ha reconocido que no se trata del dinero sino de defender el cumplimiento de lo acordado y se ha mostrado favorable a que parte de esa cantidad vaya a una organización no gubernamental
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