Guinness no reconoce finalmente el record de la tortilla

El 2 de agosto de 2104 la plaza de la Virgen Blanca de la capital alavesa se convirtió en una cocina gigante en la que el chef alavés Senén González coordinó el cocinado de la tortilla, una actividad que se organizó coincidiendo con el título de la Capitalidad Gastronómica que ese año lucía Vitoria. Pero el proceso de cocinado no se desarrolló íntegramente ese día, sino que desde la víspera se prepararon pequeñas porciones que después se unieron en una sartén de grandes dimensiones para conformar una tortilla de cinco metros de diámetro.

El Libro Guinness de los Récords no aceptó la forma en la que se llevó a cabo, "en porciones precocinadas tipo puzzle", y desde entonces, los organizadores de la prueba mantienen conversaciones con esta organización para tratar de demostrar que Vitoria es merecedora del título. Guinness comparó la tortilla de Vitoria con otra que se elaboró en 1994 en Japón y que sí consiguió el título, "aunque ahora Guinness ha admitido que la versión nipona no cumplía los requisitos para ser considerada una tortilla puesto que no se ajustaba a la receta tradicional de este plato", ya que era "un revoltillo de huevo y leche", ha indicado el director general de la Capital Española de la Gastronomía.

"Falta de rigor"

Pedro Palacios ha subrayado que Guinness "ha aceptado su error" pero la alternativa que ofrece es que Vitoria repita el intento según la receta oficial. Para los organizadores de la prueba, la capital alavesa ya culminó con éxito el intento y han lamentado que la "falta de rigor" de Guinness haya perjudicado a la capital alavesa porque "sobre unos hechos erróneos se orquestó una campaña de desprestigio de un acto multitudinario y de la propia Capital Gastronómica de Vitoria para desgastar por motivos políticos un proyecto alentado por el Ayuntamiento".

Los gestores de la Capital Española de la Gastronomía han recurrido a otras dos organizaciones que certifican este tipo de récords y han asegurado que han dado por bueno el intento. "Han aceptado nuestras pruebas y sin miles de euros de por medio han reconocido la tortilla de patata de Vitoria como la más grande del mundo", han subrayado. Las organizaciones que han reconocido el récord de la capital alavesa son RHR (Record Holders Republic) y OWR (Official World Record), y ambas han emitido los certificados que así lo acreditan.

Por ello, el presidente de la Capital Española de la Gastronomía ha felicitado a Vitoria "porque al fin se ha hecho justicia" y ha opinado que "afortunadamente, el mundo de los récords no acaba con el Guiennss". El Ayuntamiento de Vitoria anunció en su día que no pagaría los 50.000 euros que le faltaban de abonar del canon por el título de la Capitalidad Gastronómica en 2014 mientras no se resolviera el recurso planteado ante el Libro Guinnes.