Gorka Kijera vuelve al Eibar dos años después de marcharse al Cartagena

Gorka Kijera considera que el hecho de ser el primer fichaje del Eibar de cara a su retorno a Segunda División es anecdótico. Lo que de verdad valora el hernaniarra es que el club armero le haya incluido en el nuevo proyecto que se pondrá en manos de Gaizka Garitano, al que tuvo como segundo entrenador el año en el que Ángel Viadero dirigió el equipo azulgrana. «Desde que me fui he tenido una gran relación con el club, por lo que las negociaciones para volver han sido muy sencillas. Ellos me querían y yo deseaba volver, de modo que ha sido bastante rápido. Conozco la casa y que el entrenador, que ya me conoce, cuente conmigo ha facilitado mucho las cosas», apunta.

El fichaje se ha dilatado en el tiempo debido a que Gorka Kijera aún tenía contrato con el Real Unión, aunque ha logrado rescindirlo gracias a una cláusula que incluyó a la hora de negociar el cobro del dinero que se le adeudaba, en la que se estipulaba que si llegaba a un acuerdo con un equipo de categoría superior podría obtener la carta de libertad. «Me debían una cantidad y una de las condiciones para rebajar la deuda era la de poder rescindir el contrato en caso de que algún equipo de Segunda quisiera ficharme», explica el jugador.

En cuanto se llegó al acuerdo de rescisión, el lateral se acercó el martes a Ipurua para concretar su retorno al Eibar dos años después de que abandonara la disciplina armera para dar el salto a Segunda con el Cartagena. «¿Dónde mejor que en Eibar?», declara a la hora de relatar los motivos que le han llevado a recalar de nuevo en Ipurua. «Mi objetivo era volver a jugar en Segunda y sé que aquí voy a estar a gusto, en familia. Es un sitio que una vez que conoces, quieres volver, y aquí vengo, con toda la ilusión del mundo a ayudar al Eibar a lograr que el equipo se mantenga en la categoría en la que ha merecido estar mucho antes que ahora».

Bajó con el Cartagena

En la temporada que permaneció en Segunda con el Cartagena, con el que descendió, comprobó la dureza de la competición, en la que hay muchos equipos con potencial para estar en Primera. «Es una categoría muy complicada. Noté mucha diferencia, más que de Preferente a Segunda. Tienes que ser muy sólido, porque si no estás perdido. Es un año para sufrir, porque no hay ningún rival pequeño».

Pasan los años, pero lo que no cambiará es el hecho de que el Eibar volverá a ser el club con el presupuesto más reducido de la categoría, lo que a juicio de Kijera, debe servir para motivar aún más a la plantilla armera. «El Eibar siempre ha sido el que menor presupuesto ha tenido y eso no va a cambiar. Eso da una idea del mérito que tiene lo que ha hecho históricamente en esta categoría. Eso debe ser una motivación extra para nosotros, luchar a muerte por conseguir la permanencia».

Pese a que el Real Unión no consiguió colarse en la disputa por el ascenso, el defensa hernaniarra completó una destacable campaña, en la que acumuló 2.951 minutos repartidos en 33 partidos, en los que anotó dos goles.

Deseoso de empezar

El próximo día 17 de julio estará como un clavo en el vestuario armero, deseoso de empezar a trabajar tras unas vacaciones muy largas. «Llevo ya casi dos meses de vacaciones y, aunque mal no se está, estoy con muchas ganas de empezar. Se echa de menos entrenar y las vivencias del vestuario».

Ahí confía en coincidir con los que en su día fueron sus compañeros, aunque de momento, el único que tiene asegurada su continuidad es Mikel Arruabarrena. «A falta de saber qué va a pasar con Xabi, Txema y Abaroa, Arru es el único que sigue de aquella época, pero todos nos conocemos, aunque las cosas cambian muy rápido en el fútbol».

Portería sellada

Ayer al mediodía, el guardameta Xabi Iruretagoiena selló un acuerdo por el cual el portero permanecerá en la disciplina del Eibar por una temporada más, hasta el 30 de junio del 2014.

Con esta renovación, la Dirección Deportiva y Cuerpo Técnico, aseguran la continuidad de una pieza fundamental la pasada campaña. Xabi es la primera de las renovaciones con las que se pretende dar continuidad a gran parte del bloque que consiguió el ascenso.